Teherán, 30 may (EFE).- Las líneas rotas, los rostros fragmentados y la energía inagotable de Pablo Picasso han conquistado el corazón de Teherán, por lo que se ha prolongado la exposición de las obras del genio español en el Museo de Arte Contemporáneo de la capital iraní.
Las salas del museo, ubicado en el corazón de la capital iraní, se llenan cada día de estudiantes, familias y curiosos que se detienen, contemplan y se maravillan en silencio ante las obras maestras de Picasso.
Se trata de la primera exposición en solitario del pintor español en el país persa, que arrancó el 11 de marzo y se ha prorrogado hasta el 3 de junio.
“La acogida ha superado nuestras expectativas. Hemos recibido un promedio de 1.000 visitantes diarios. Ante el gran interés de los iraníes por descubrir a Picasso, decidimos extender por tercera vez la muestra”, explicó a EFE Ali Rezaei, curador de la exposición.
Bajo el título “Picasso: Forma y Ruptura”, la exhibición reúne 66 obras del artista malagueño, entre pinturas, dibujos y grabados, algunas de ellas pertenecientes a la valiosa colección del propio museo, adquirida antes de la Revolución Islámica de 1979.
Organizada de forma cronológica y temática, permite al visitante transitar desde las influencias clásicas hasta las rupturas cubistas y las obsesiones de sus últimos años.
Entre las obras más admiradas figuran una serie de litografías de los años 40 y un retrato de mujer que ilustra la etapa expresionista del pintor. También se exhiben textos explicativos sobre su influencia en el arte moderno y su compromiso político.
“Me sorprendió lo provocadoras que son sus obras”, comentó Sara, una estudiante de Bellas Artes, que se mostró “enormemente feliz” por tener estas piezas en Irán.
“Picasso rompe con todo y, aun así, emociona”, afirmó con asombro la joven de 22 años.
Para algunos, la exposición representa una oportunidad única.
“Es la primera vez que veo un Picasso original”, dijo Dariush, de 44 años y profesor de historia del arte, quien pidió más iniciativas como esta, que “conecten al público iraní con las corrientes artísticas internacionales”, agregó.
Los dirigentes del Museo de Arte Contemporáneo de Teherán afirmaron sentirse orgullosos de organizar esta exposición del maestro español del cubismo.
“Picasso es uno de los pilares del arte moderno, y tener sus obras en nuestras paredes es motivo de orgullo”, señaló Maryam Hojati, directora adjunta del museo.
La exposición tiene previsto cerrar con un ciclo de conferencias y talleres dedicados a la vida y obra del artista español que redefinió el arte del siglo XX.
Los tesoros del museo
Además de las obras de Picasso, la colección de este museo, considerada una de las más valiosas de Oriente Medio, incluye también piezas de Vincent van Gogh, Francis Bacon, Mark Rothko y Andy Warhol, entre otros.
Obras que permanecieron almacenadas durante décadas tras la Revolución Islámica, acontecida dos años después de la creación del museo por Farah Diba, esposa del último sah de Irán, Mohamad Reza Pahlaví.
Pero en los últimos años, el centro organiza exposiciones temporales en las que muestra sus tesoros, como una exposición de Andy Warhol en 2021 y otra sobre los retratos de Picasso, Van Gogh o Warhol en 2024.
El museo se mostró interesado en seguir exponiendo obras de artistas internacionales, que atraen a más público.
Los visitantes desean lo mismo.
“Espero que podamos ver todos los tesoros que almacena el museo de manera más continua. Que no nos priven de ver estas grandes obras”, dijo Azadeh, una arquitecta, al final de su visita al museo.
Aydin Shayegan
