Javier Aguirre: «Hay cositas que podemos hacer mejor»

(De izquierda a derecha) Gilberto Mora, Carlos Rodríguez y Erik Lira, de México, en el podio de premios después de su victoria 2-1 contra Estados Unidos tras la final de la Copa Oro de la Concacaf en Houston, Texas (Estados Unidos). EFE/CARLOS RAMIREZ

Redacción deportes, 6 jul (EFE).- El seleccionador de México, Javier Aguirre, celebró este domingo el crecimiento de su equipo para ganar la Copa Oro de la Concacaf, pero dejó claro que el grupo tiene margen de mejoría rumbo a la Copa Mundial del 2026.

El equipo de México posa con su trofeo de Campeones tras derrotar a Estados Unidos, 2-1, en la final de la Copa Oro de la Concacaf entre Estados Unidos y México en Houston, Texas, (Estados Unidos). EF/CARLOS RAMIREZ

«Hay cositas que podemos hacer mejor. A veces me equivoco, aunque tengo un cuerpo técnico que me abre los ojos. Podemos mejorar en las jugadas a balón detenido, en la falta de comunicación en el medio campo y en el tránsito de la pelota», reconoció Aguirre.

El arquero Guillermo Ochoa (c) de México sostiene el trofeo de Campeón celebrando con sus compañeros en su victoria de 2-1 contra Estados Unidos después de la final de la Copa Oro de la Concacaf entre Estados Unidos y México en Houston, Texas (Estados Unidos). EFE/CARLOS RAMIREZ

México derrotó por 1-2 a Estados Unidos para retener el título de la Copa Oro, después de lo cual el ‘Vasco’ destacó el cambio de actitud de los futbolistas mexicanos.

«Antes venían forzados; hoy quieren venir a la selección. No es mi legado; es algo que me propuse. La gente que está fuera, quiere volver», explicó.

Aguirre enfatizó en que México fue el justo ganador de la Copa Oro, pero dejó claro que el mérito es de los futbolistas.

«Los entrenadores dependemos de los jugadores. No es el entrenador el que gana; son estos amigos míos que lo hicieron muy bien. Se reflejó en el rendimiento; el equipo fue avanzando», agregó.

México ganó su decimotercer título de la Copa Oro, seis más que Estados Unidos, lo cual para Aguirre fue muy importante a menos de un año de la Copa Mundial.

«El triunfo nos llena de orgullo; da confianza y energía para el futuro. Nos quedan partidos amistosos; el Mundial será la prueba de fuego y tenemos un año para hacerlo bien», opinó.

De 66 años, el seleccionador mexicano aceptó estar agotado físicamente, lo cual le impidió bailar esta noche en la celebración del triunfo de México.

«Eramos favoritos y cumplimos. Ahora estoy fundido, pero una cerveza no me la va a quitar ni Dios», concluyó.