Javier Cercas se adentra en el Vaticano: “No va a ser fácil una contrarrevolución”

MADRID, 31/03/2025.- El escritor Javier Cercas presenta su nuevo libro, 'El loco de Dios en el fin del mundo', una "novela sin ficción" en la que se adentra en el Vaticano y acompaña al papa Francisco en un viaje a Mongolia, este lunes en Madrid. EFE/ Fernando Villar

Madrid, 31 mar (EFE).- Ateo, anticlerical y laicista militante, según su propia definición, el escritor y académico Javier Cercas se ha adentrado en el Vaticano en su nuevo libro, ‘El loco de Dios en el mundo’ (Random House), y cree que “no va a ser fácil una contrarrevolución” después del papado de Francisco I.

“Los detractores de Francisco son muchos y muy poderosos y sueñan con darle un giro a la Iglesia, yo creo que no va a ser tan fácil”, ha dicho el escritor en una rueda de prensa en el Instituto Cervantes.

El autor de ‘Soldados de Salamina’ o ‘El impostor’ ha señalado que, pese a la opinión generalizada de que “el mundo está girando en dirección contraria a las ideas de Francisco” -un giro que ha dudado en calificar de “conservador” porque “Trump y Elon Musk son otra cosa”-, no será fácil revertir los “profundos cambios” que el papa ha imprimido a la Iglesia católica.

En ese sentido, ha recordado que Francisco ha nombrado a casi un 80 % de los cardenales que elegirán a su sucesor y ha subrayado que “el centro de la Iglesia ya no está en Europa y mucho menos en Italia” y que eso está reflejado en su jerarquía.

Francisco, un papa “anticlerical”

Cercas recibió la propuesta para escribir este libro, que cabalga entre el ensayo, la crónica, la biografía y la autobiografía, en mayo de 2023, cuando estaba firmando libros en el Salón del Libro de Turín y un representante del Vaticano se le acercó.

Era Lorenzo Fazzini, responsable de la editorial de la Santa Sede y le invitó a sumarse a un viaje con el Papa a Mongolia y a acceder al interior del Vaticano para escribir un libro con total libertad para escribirlo y publicarlo.

“La pregunta que no les hice es por qué pensaron en mi, pero sé que ningún escritor en su sano juicio habría rechazado la propuesta”, ha dicho Cercas, que pudo mantener conversaciones con cardenales, misioneros, expertos vaticanistas y con el propio papa.

Según Cercas, el pontífice ve dos grandes problemas en la Iglesia, uno es el clericalismo y otro el constantinismo.

“Francisco es un papa anticlerical”, ha dicho Cercas, en el sentido de que no cree que el clero esté por encima de los fieles, un presupuesto del que se han derivado conflictos serios como los abusos sexuales.

“Los abusos sexuales son abusos de poder, es algo que en España hemos padecido mucho”, ha subrayado el escritor, ganador de multitud de galardones, desde el Premio Nacional de Narrativa al Premio Planeta.

En cuanto al “constantinismo”, que implica la unión de poder político y religión, Cercas ha asegurado que el papa lo ve como una “catástrofe” y que el cristianismo es “una religión subversiva” que “no puede estar con el poder”.

“Me han acusado de blanquear todo, me van a llamar Titanlux”

El escritor extremeño ha asegurado que ha tenido que vencer sus propios prejuicios para adentrarse en la escritura de lo que él llama “una novela sin ficción”, pero niega haber recuperado la fe tras esta experiencia y rechaza las acusaciones de “blanquear a la Iglesia”.

“Los escritores no nos dedicamos a juzgar sino a entender”, ha defendido. “Entender no es justificar, si acaso es darse instrumentos para no cometer los mismos errores”, ha precisado el autor, que confiesa estar acostumbrado a recibir este tipo de acusaciones.

Mencionó sus novelas ‘El monarca de las sombras’, dedicada a un falangista, o ‘El impostor’, sobre un falso superviviente de los campos de concentración. “Me han acusado de blanquear todo, me van a llamar Titanlux”, ha dicho.

“Shakespeare no se dedica a juzgar a Ricardo IIi, el mayor asesino de la historia, sino a entenderlo (…), por eso la literatura es útil, siempre y cuando no pretenda serlo, que sería propaganda; si a eso lo llaman blanquear, es un argumento pobre y falso”, ha rematado.

En su libro, que ha calificado de “gamberro”, tampoco renuncia al humor, que considera “el primer instrumento de conocimiento de la novela”. Lo que no se esperaba, ha confesado, es encontrarse con un papa que hace “una feroz reivindicación de la ironía y el humor”.