Madrid, 23 may (EFE).- JetBlue, la sexta mayor aerolínea de Estados Unidos, ha desembarcado este viernes en España, donde compite con Iberia en la ruta Boston-Madrid, que operará inicialmente en temporada de verano, aunque considerará en el futuro mantenerla durante todo el año, según su presidente, Marty St. George.
La compañía operará su nueva ruta con una frecuencia diaria hasta el próximo 25 de octubre con aviones A321XLR -el mismo modelo que utiliza Iberia para enlazar ambos destinos durante todo el año-, que disponen de su galardonada experiencia ‘premium Mint’, con suites privadas totalmente reclinables.
En general, la base de clientes de JetBlue es ligeramente diferente a la de Iberia, al tener mayor penetración en el mercado de ocio que en el de negocios y el hecho de que exista una demanda de ocio ‘prémium’ muy fuerte desde Estados Unidos a Europa ha contribuido a que su producto ‘Mint’ sea muy exitoso, ha señalado en una entrevista con EFE.
El presidente de JetBlue, que ha volado con Iberia en algunas ocasiones, se ha mostrado “completamente seguro” de que la experiencia del cliente de su compañía, tanto en clase turista como en turista ‘prémium’, “es mejor” que la de la aerolínea española.
Con el nuevo vuelo de Boston a Madrid y a Edimburgo, que también se ha inaugurado hoy, JetBlue amplía este verano sus conexiones con Europa a un total de siete, al sumarse estos dos nuevos destinos a los también estacionales de Ámsterdam, Dublín y Londres-Gatwick y a los que opera durante todo el año de Londres-Heathrow y París.
España está enhorabuena en cuanto a la oferta de vuelos a Boston, ya que esta mañana también ha aterrizado en Barcelona el primer vuelo de Delta desde dicha ciudad estadounidense.
Planes de crecimiento en el futuro
En función de los resultados de este primer verano y del segundo, JetBlue considerará la posibilidad de mantener la ruta operativa durante todo el año a partir del invierno de 2026/2027, ha adelantado.
A su juicio, el mercado transatlántico es muy dinámico y hay mucha competencia en frecuencias, pero no tanta en productos, por lo que ve oportunidades de crecimiento.
No obstante, la decisión de abrir más destinos en España en el futuro, donde la siguiente ruta lógica podría ser Madrid-Nueva York, dependerá del éxito cosechado por sus vuelos desde Boston.
“Si tenemos un éxito sostenible en Boston, sin duda, buscaremos otras oportunidades y conectar esta ciudad o Nueva York con Barcelona es también una opción obvia”. “Soy muy optimista sobre las cifras que estamos viendo hasta ahora, así que ya veremos más adelante”, ha agregado.
El directivo ha reconocido que uno de los mayores retos es que JetBlue es una aerolínea con un modelo de negocio poco conocido en Europa.
“Tenemos un equipo de ventas en Madrid, hemos sido muy agresivos con las agencias de viajes porque tienden a reservar más con los clientes de ocio y, hasta ahora, estamos muy contentos con los resultados de los puntos de venta de España”, ha afirmado.
Cuando se buscan aerolíneas de bajo coste en Europa, la gente piensa inmediatamente en Ryanair o EasyJet, que ofrecen precios muy económicos y una experiencia muy básica.
JetBlue no se centra en eso, sino que ofrece una experiencia de cliente mucho mejor que cualquiera de esas aerolíneas y, de hecho, compite con las compañías más grandes de Estados Unidos, ha aclarado.
“Acabamos de ganar un premio a la mejor clase ejecutiva de Norteamérica y, obviamente, es un producto muy importante para nosotros, tanto en Europa como en Estados Unidos”, ha recalcado.
JetBlue no tiene aviones de fuselaje ancho y, en su opinión, “los de fuselaje estrecho son una gran oportunidad para mantener bajos nuestros costos, ya que tienen menor coste por asiento”.
Para celebrar su entrada en España, y por tiempo limitado, los viajeros con salida de Boston cuentan con tarifas especiales de ida y vuelta desde 699 dólares en clase turista y desde 2.399 en la cabina Mint, y de España, a partir de 599 y 1.999 euros, respectivamente.
La compañía se centra básicamente en volar a los principales destinos de ocio como, por ejemplo, desde Nueva York o Boston, a Florida, el Caribe, la Costa Oeste y Europa.
“Estamos gratamente sorprendidos por lo bien que nos ha ido en Europa, lo que se debe a que grupos aéreos tradicionales como IAG, Air France o Lufthansa ponen el foco en los clientes frecuentes y de alto rendimiento”, mientras que JetBlue ofrece una experiencia excelente a todos.
El verano está avanzando como esperábamos en cuanto a la operación transatlántica, mientras que el mercado nacional ha bajado considerablemente con respecto a los niveles históricos y a nuestras expectativas para 2025, pero prácticamente se ha estabilizado y, por tanto, es como una nueva normalidad de menor demanda.
Hemos pasado por múltiples desaceleraciones, pero ésta es diferente porque es realmente un problema económico impulsado por Estados Unidos y que no se ve en el resto del mundo, del que St. George espera que sea más fácil recuperarse que de la pandemia global de covid o la crisis financiera mundial de 2008-2009.
La compañía, que ha reducido su capacidad y flota, seguirá reaccionando en función de la evolución de la demanda, ha dicho el directivo: “Tenemos mucha suerte de que JetBlue, comparada con las grandes aerolíneas estadounidenses, tenga aviones más pequeños, porque esto le permite una mayor flexibilidad y agilidad a la hora de realizar cambios”.