Inmaculada Tapia
Madrid, 17 mar (EFE).- Cuando hace once años Jonathan Anderson se hizo con los mandos de Loewe, más de uno en el mundo de la moda se echó las manos a la cabeza. A sus 29 años, el diseñador irlandés comenzó a capitanear uno de los trasatlánticos de la industria, con más de 170 años de historia, que tiene la artesanía por bandera.
“La artesanía es uno de mis principales intereses y la he convertido en el eje de la identidad de Loewe”, así se expresaba Jonathan Anderson que concibió a través de la Fundación de la firma la creación del premio Craft Prize con el objetivo de celebrar la excelencia y la innovación en la artesanía moderna para dar a conocer a artistas cuyo “talento, visión y voluntad de innovación prometen crear nuevos estándares para el futuro”.
El premio es para la firma un homenaje a su nacimiento como taller colectivo de artesanía en 1846 y una de las iniciativas de las que el creador se siente más “orgulloso” en su camino en la “casa”. “Desde el primer día, imaginé la creación de una marca cultural”, ha dicho este viernes en su despedida Anderson.
Un premio al que se presentan obras de todo el mundo se enmarca en el área de artes aplicadas en categorías como: cerámica, lacado, encuadernación, esmaltado, joyería, piel, textil, madera, metal o vidrio.
Él mismo ha contado con colaboraciones externas de artesanos en sus colecciones como la de Idoia Cuesta en 2021, que utiliza el arte Shibori, una técnica textil japonesa, un país por el que ha confesado su fascinación.
“Es alucinante cómo una técnica que ha sido utilizada durante tantas generaciones pueda tener un efecto tan contemporáneo”, señaló en una entrevista con EFE.
Zendaya, Demi Moore, Rihanna en la Super Bowl (2023) o Emma Watson o una sensual Beyonce en su gira ‘Renaisssance’ (2023) son algunos ejemplos de estilo rompedor con las que Anderson ha posicionado una marca que comenzaba, antes de que el tomara las riendas, a tomar un camino decadente.
Anderson estudió en el London College of Fashion, y comenzó su carrera en 2008 con su propia firma, diseñando moda masculina, aunque rápidamente amplio su actividad a la creación de colecciones femeninas. Su corte preciso, su modo de combinar tradición y modernidad y su aproximación a la idea de un guardarropa compartido fueron su carta de presentación.
Ha conseguido atraer hacia Loewe, que pertenece al grupo de lujo francés LVMH, a clientes estadounidenses y británicos y especialmente se ha expandido en Asia, donde ha multiplicado su presencia con tiendas físicas.
El creativo irlandés la ha dotado de modernidad y atrevimiento, manteniendo la esencia de un concepto artesano llevado a las últimas consecuencias de la más rabiosa modernidad como demostró con su colección cápsula basada en la iconografía de la película japonesa ‘Mi vecino Totoro’.
En 2023 fue galardonado con el Premio al Diseñador Internacional del Año en los Premios CFDA 2023 en Nueva York y en 2024 fue nombrado Diseñador del Año en la última edición de los Premios de la Moda Británica.
Hace justo una semana en la casa de Lagerfeld presentó su última colección para Loewe inspirada en el arte de los Albers.
Aún no se ha desvelado hacia dónde se dirigirán sus próximos pasos, pero el sector apunta a que será Dior su próximo destino, donde podría ocupar el puesto de Maria Grazia Chiuri.