Granada, 7 oct (EFE).- El Juzgado de Instrucción 4 de Granada tomará este miércoles declaración a Francesco Arcuri tras denunciar a su expareja, Juana Rivas, por un delito de sustracción internacional de menores, cargos que ella espera que le sirvan para demostrar el maltrato físico y psicológico del denunciante.
La titular del juzgado instructor ha citado para este miércoles a Arcuri, que declarará desde Italia para corroborar la denuncia interpuesta contra la que fue su mujer, Juana Rivas, a la que acusó de un delito de sustracción de menores por evitar que el hijo pequeño de ambos regresase con el padre en enero de este año.
El equipo jurídico de Juana Rivas, a la que representa Carlos Aránguez, ha confiado en que esta denuncia se convierta en una «excelente oportunidad» para que ella demuestra que el italiano ejercía «violencia física y psíquica» contra el menor de los hijos, Daniel, y que lo hacía de forma «sistemática».
Según Aránguez, la «gravísima» acusación, por la que Juana Rivas tendrá que declarar en calidad de investigada el próximo 30 de octubre, permitirá abordar el fondo del asunto.
El equipo jurídico de Juana Rivas ha reconocido que es innegable que Daniel no regresó en enero a Cagliari con su padre, que tiene su custodia, pero ha confiado en que esta nueva causa sirva para demostrar el maltrato familiar del que acusa a Arcuri.
Aránguez ha recordado que, como denunciante, el italiano tiene obligación de declarar y de decir la verdad y ha esperado que su denuncia «infundada» por sustracción de menores se le vuelva en contra.
«Nos permite acreditar en España que es un maltratador. Hemos aportado ya contundentes pruebas documentales del maltrato: informes médicos, fotografías de las lesiones, y audios del propio Arcuri ejerciendo violencia física y psicológica sobre los menores», ha añadido el letrado en un comunicado.
Ha adelantado que el equipo solicitará que se escuche al niño, de once años, y que se haga «lejos de la amenaza» de su padre, lo que le permitiría según el letrado volver a decir que su vida con el italiano es «un infierno».
La defensa de Juana Rivas incluirá en esta causa la declaración como testigo del otro hijo de la expareja, ya mayor de edad, mientras que ella aprovechará su citación para explicar el «terrible dilema» que ha tenido que afrontar.
Aunque Instrucción 4 ha citado a Arcuri y Rivas por la denuncia de sustracción internacional de menores contra ella, Aránguez ha asegurado que la justicia española tendrá ahora que decir si él es o no un maltratador.
El italiano acusó a su expareja de un delito de sustracción de menores por incumplir la orden dictada por un tribunal italiano el pasado febrero para que el menor de sus dos hijos regresase a casa con él tras unas vacaciones en España.
Instrucción 4 tomará declaración a Rivas como investigada por el mismo delito por el que ya fue condenada a cinco años de prisión, una pena que el Tribunal Supremo redujo en 2021 a la mitad.