Buenos Aires, 10 jun (EFE).- El gobernador de la provincia de Buenos Aires, el peronista Axel Kicillof, afirmó que el fallo de este martes de la Corte Suprema contra la expresidenta argentina Cristina Fernández (2007-2015) es una «infamia» y que la democracia ha quedado «profundamente herida» en el país suramericano.
«Hoy condenan a Cristina Fernández, un final anunciado tras años de perversa persecución política, mediática y judicial. Esta condena termina de consagrar una auténtica infamia», aseveró Kicillof a través de la red social X.
Este martes la Corte Suprema dejó firme una condena contra Fernández a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos en la denominada ‘causa Vialidad’ que se centró en irregularidades en la concesión de obras viales en la sureña provincia argentina de Santa Cruz.
«Se trata de un nuevo capítulo en la larga historia de ataques al peronismo y a quienes, como ella, se atrevieron a transformar la Argentina en favor de las mayorías», sostuvo el gobernador de la provincia más poblada del país.
Kicillof, que en los últimos meses había tenido discrepancias con Fernández, se mostró en estos días cercana a la exmandataria y líder del Partido Justicialista (PJ, peronista).
Fernández planeaba presentarse como candidata a legisladora provincial en los comicios que celebrará en septiembre la provincia de Buenos Aires, gobernada por Kicillof desde 2019.
La decisión de la Corte impide esa candidatura.
Kicillof señaló que durante el Gobierno del conservador Mauricio Macri (2015-2019) «e montó un sistema de espionaje ilegal, se armaron causas y se manipularon pruebas para perseguir a Cristina, a su familia y a sus exfuncionarios».
Aseveró que el ‘lawfare’ (hostigamiento judicial y político) y «la estigmatización del campo popular se convirtieron en políticas de Estado».
«Y hoy, con un presidente para quien ‘la justicia social es una aberración’, el clima de odio, autoritarismo y hostigamiento se ha intensificado», advirtió el mandatario provincial, uno de los principales dirigentes opositores al Gobierno del ultraderechista Javier Milei.
Kicillof afirmó que «tanto Macri como Milei desprecian la democracia con la misma intensidad con la que desprecian la dignidad del pueblo» y que, por eso, «celebran» el fallo contra Fernández.
Sostuvo que a lo largo de todo el proceso judicial contra la expresidenta «fiscales y jueces actuaron con ánimo revanchista, sin el menor apego por la verdad y por la justicia», «no investigaron los hechos» sino que «ejecutaron un plan, o en otras palabras, y dado el carácter mafioso de quienes la persiguen, una vendetta» (venganza mafiosa).
«Buscan, en realidad, disciplinar a la dirigencia y garantizar privilegios económicos. Hoy esa democracia queda profundamente herida. Y nuestra responsabilidad histórica es defenderla», añadió.