Buenos Aires, 8 oct (EFE).- La actividad de la construcción en Argentina aumentó en agosto pasado apenas el 0,5 % con respecto a julio último, tras haber caído el 1,9 % en el séptimo mes del año, informaron este miércoles fuentes oficiales.
Según un informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), la actividad de la construcción registró en el octavo mes de 2025 un avance de tan solo el 0,4 % en comparación con igual mes del año anterior, su séptima subida consecutiva, aunque con una marcada desaceleración en el ritmo de expansión.
En los primeros ocho meses del año, la actividad de la construcción acumuló una subida del 8 %.
Los puestos de trabajo en el segmento de la construcción crecieron un 4,6 % interanual en julio último, hasta los 388.750.
La superficie a construir autorizada por los permisos de edificación otorgados para la ejecución de obras privadas registró en julio una subida del 5 % con respecto al mismo mes del año anterior.
De acuerdo con un informe del Grupo Construya, que reúne a empresas productoras y comercializadoras de materiales para la construcción, las ventas de estos productos registraron en agosto pasado una caída del 8,59 % con respecto a julio último y un descenso del 5,5 % en términos interanuales.
«En los últimos dos meses la demanda de insumos para la construcción perdió fuerza. La recuperación sectorial, que venía mostrando una desaceleración leve hasta junio, se transformó en contracción en julio y agosto», señaló Construya en su informe.
Según la entidad, en agosto «los despachos resultaron inferiores en términos interanuales por primera vez en siete meses».
«El cambio del contexto macroeconómico que se dio a partir de junio, reflejado en la fuerte suba de la tasa de interés, está impactando de forma negativa en la dinámica sectorial. Esperamos que este fenómeno sea de carácter transitorio», señaló Construya.
El sector de la construcción ha sido uno de los más afectados en 2024 por el cuadro de retracción económica, elevada inflación, pérdida del poder de compra de los hogares y severo ajuste fiscal sostenido por el Gobierno de Javier Milei, que incluyó la paralización de las obras de infraestructura pública.
«Este sector es uno de los más perjudicados por la última recesión y actualmente se ubica en el menor nivel desde 2009, si exceptuamos el periodo de pandemia y los peores meses del año pasado», observó en un informe el Centro de Investigación del Ciclo Económico de las Bolsas de Comercio de las ciudades de Rosario y Santa Fe.
La actividad de la construcción se hundió el año pasado un 27,4 %, su peor desempeño desde 2002, tras haber caído un 3 % en 2023.