Madrid, 30 jul (EFE).- “Crear una red gigante de niños que quieran salvar y cuidar la Naturaleza” es uno de los grandes objetivos de la exploradora Elvia Gómez Troya que, con solo 13 años, acaba de ser distinguida con el galardón Young Scientific Explorer Award 2025.
El premio, concedido por la Sociedad de Exploración Científica (SES, por sus siglas en inglés) a defensores del medioambiente con una trayectoria destacada y considerado una especie de ‘Óscar de la exploración’, reconoce la «pasión, determinación e inspiración para toda una comunidad global» de esta adolescente que ha participado en sucesivas expediciones internacionales de rastreo de fauna en más de diez países, protagonizando paseos interpretativos, charlas informativas de sensibilización y otras actividades educativas.
Elvia «la rastreadora», como es conocida en la red social de Instagram donde acumula cerca de 30.000 seguidores, es la primera española que recibe esta distinción que, según explicaba en una entrevista con EFE, le hace «mucha ilusión», además de alentarla en su labor de divulgación a pocos días de emprender una nueva expedición, esta vez a la Amazonía boliviana.
Fundada en 1969, la SES es la organización de exploración científica en activo más antigua del mundo, en cuyo consejo asesor figuran especialistas como la etóloga Jane Goodall o el especialista en supervivencia Bear Gryll, y su trabajo ha promovido «la investigación científica, la conservación ambiental y el desarrollo de comunidades en regiones remotas del planeta».
“Estoy muy orgullosa de esto porque ahora, además de rastreadora, soy parte de la comunidad internacional de exploradores y naturalistas de la SES y puedo enseñar a los demás, transmitir todo mi conocimiento y amor por la Naturaleza”, ha aseverado Elvia, enfatizando su deseo de llegar, sobre todo, a los más pequeños «para generar conciencia».
Animales flipantes
Su vocación ambiental surgió gracias a la actividad de sus padres, Fernando Gómez y Paloma Troya, ambos rastreadores profesionales de fauna con una larga experiencia en expediciones por todo el mundo.
Desde los cuatro años de edad les acompaña en sus viajes por países como Tanzania, donde convivió junto a la tribu cazadora de los hadzabe, o Zambia, donde colaboró en tareas de activismo contra la caza furtiva.
Sus primeras experiencias fueron plasmadas en su libro ‘Cosas que me flipan de los animales’, publicado cuando tenía 11 años y donde describe características de especies exóticas junto a dibujos hechos por ella misma: el texto ayudó a financiar sus siguientes misiones internacionales,
«Tenía el reto personal de terminar el libro antes de cumplir 12 años, así que compaginé la escuela, las clases de baile y las artes marciales con la elaboración del texto y los dibujos» no sólo para divulgar sino para que “no se pierda la esencia de subrayar una página y que las redes sociales no sustituyan a los libros”.
Su próxima obra, compartida con sus padres, recopilará más de 15 años de investigación de éstos para configurar una guía técnico-divulgativa sobre huellas y rastros de mamíferos de Europa y será publicada el próximo otoño por la editorial Tundra.
Próxima parada, la Amazonía
El próximo destino de Elvia y su familia será el parque nacional Madidi, considerado el más biodiverso del planeta, ubicado al norte de La Paz en la Amazonía boliviana, adonde viajarán a primeros del mes de agosto en busca de la población indígena tacana, cuyo entorno natural está amenazado por la minería ilegal de oro, la contaminación con mercurio, la deforestación y la caza de especies exóticas como el jaguar.
Allí no solo estudiarán la fauna sino que también formarán a media docena de jóvenes tacanas como guías rastreadores, una alternativa profesional vinculada al ecoturismo y la conservación.
Aunque no sabe todavía que quiere estudiar «cuando sea adulta», Elvia tiene claro que quiere continuar con su labor de «rastreadora y divulgadora» durante todo el tiempo posible.