Light
Dark
 

La amenaza israelí de destruir la ciudad de Gaza equivale a «limpieza étnica», dice Hamás

Foto de archivo del ministro israelí de Defensa, Israel Katz. EFE/EPA/ABIR SULTAN

Jerusalén, 22 ago (EFE).- El grupo islamista Hamás dijo este viernes que la amenaza del ministro israelí de Defensa, Israel Katz, de destruir y vaciar la ciudad de Gaza -en la que se refugian un millón de palestinos- equivale a admitir limpieza étnica.

Las declaraciones de Katz y «su confirmación de que la operación militar en la ciudad de Gaza busca el desplazamiento de la población mediante el uso de fuego intenso son una admisión de la comisión del crimen de limpieza étnica y desplazamiento forzoso de casi un millón de personas», apuntó el grupo islamista en un comunicado.

Katz confirmó este viernes que, anoche, aprobó junto al primer ministro Benjamín Netanyahu el plan para invadir y tomar ciudad de Gaza «con fuego intenso, evacuación de residentes y maniobras», y dijo que si Hamás no se rinde la capital gazatí terminará como las urbes de Rafah o Beit Hanoun, ya destruidas.

Hamás pidió también que se intensifique de manera global la solidaridad con el pueblo palestino y se presione para que se detenga la agresión y el genocidio.

La situación en la ciudad de Gaza, la ciudad más poblada de la Franja, es crítica y los bombardeos en los barrios de la periferia se ha intensificado en los últimos días con uno casi cada hora, según dijeron a EFE algunos residentes.

«Estamos recibiendo muchísimas peticiones de ayuda desde diferentes zonas de la ciudad Gaza», informó hoy en un vídeo el portavoz de los equipos de rescate de la Defensa Civil, Mahmud Basal, que denunció bombardeos contra hogares y ataques de artillería israelí.

El portavoz de los servicios de rescate describió «una situación catastrófica, con un colapso total del sistema de servicios en la Franja de Gaza» y pidió al mundo que salven «Gaza antes de que sea demasiado tarde».

La operación a gran escala contra la ciudad de Gaza podría comenzar en cuestión de días. El Ejército israelí ha comenzado a contactar al personal médico y a las organizaciones internacionales para que se desplacen al sur, además de haber emitido 60.000 ordenes de alistamiento a reservistas.

Sin embargo, en la capital mucha gente se resiste a irse, pues consideran que ninguna zona es segura y ya se han desplazado hasta una decena de veces en estos últimos 22 meses.