Nueva York, 21 ago (EFE).- La Bolsa de Nueva York cerró este jueves en rojo, con el índice S&P 500 cayendo por quinto día consecutivo, mientras que inversores están atentos a lo que dirá mañana el presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell durante un simposio económico en Wyoming.
La jornada del día en Wall Street terminó con el Dow Jones de Industriales cayendo un 0,34 %, hasta los 44.785 puntos; con el selectivo S&P 500 retrocediendo un 0,40 %, hasta los 6.370 enteros, y el tecnológico Nasdaq un 0,34 %, hasta las 21.100 unidades.
El mercado, así como el presidente Donald Trump, tiene su mirada puesta en Jackson Hole (Wyoming), donde se espera que Powell haga mañana un anuncio sobre el futuro de los tipos de interés y ofrecer así un alivio ante las preocupaciones sobre la inflación.
Se estima que hay una probabilidad cercana al 80 % de que el banco central recorte los tipos en su próxima reunión de política monetaria en septiembre, según la herramienta FedWatch de CME.
«La valoración de las acciones son muy elevadas en este momento de cara a Jackson Hole, y los inversores tienen expectativas muy altas de que Powell anuncie un recorte de tasas en septiembre», dijo a CNBC Rick Gardner, director de inversiones de RGA Investments.
Además de la atención al simposio económico, el mercado ha enfrentado esta semana una ola de ventas en el sector tecnológico de empresas como Nvidia, Palantir, Meta, Advanced Micro Devices o Broadcom, que han empujado a la baja al S&P 500 y al Nasdaq.
Entre las mayores cotizadas del Dow, donde la mayoría cerró a la baja, las mayores ganancias fueron para Merck & Co (1,68 %), Chevron (1,52 %) y UnitedHealth (1,17 %) y las pérdidas las encabezaron Walmart (-4,49 %) en un día que estuvo marcado por las pérdidas del gigante multinacional minorista, IBM (-1,3) y Home Depot (-1,01 %).
Mientras que el precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró el día con una subida del 1,3 %, hasta 63,52 dólares el barril, impulsado por la caída semanal en las reservas comerciales de EE.UU. y la falta de avances en las negociaciones entre Rusia y Ucrania.