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La clase política colombiana y familiares llenan el Capitolio para despedir a Uribe Turbay

El padre del asesinado precandidato a la presidencia de Colombia Miguel Uribe Turbay, Miguel Uribe (c), al abrazar al expresidente de Colombia Juan Manuel Santos este lunes, 11 de agosto, durante el velorio del senador, en el Salón Elíptico del Capitolio Nacional, en Bogotá (Colombia). EFE/Carlos Ortega

Bogotá, 11 ago (EFE).- Centenares de políticos colombianos y familiares del senador Miguel Uribe Turbay, fallecido este lunes a los 39 años, dos meses después de ser gravemente herido en un atentado que conmocionó al país, se congregaron hoy en el Salón Elíptico del Capitolio Nacional, sede del Congreso, para rendirle tributo.

Al recinto legislativo, donde es esperado el féretro de Uribe Turbay, llegaron congresistas de distintas fuerzas políticas y personalidades como los expresidentes César Gaviria (1990-1994) y Juan Manuel Santos (2010-2018); el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, y el jefe de la misión diplomática de EE.UU. en Colombia, John T. McNamara.

En el salón, lleno de coronas fúnebres y con dos grandes pantallas que muestran el rostro de político asesinado, también están familiares del senador y precandidato presidencial del partido de derecha Centro Democrático, entre ellos su esposa, María Claudia Tarazona, quien, al ingresar, se fundió en un abrazo con el padre del líder asesinado, Miguel Uribe Londoño.

«Se fue un hombre maravilloso que soñaba con la paz y la unión de Colombia, con un país donde ningún niño repitiera la historia que hoy su hijo está repitiendo. Romper una familia es el acto de violencia más horrible que se pueda cometer jamás», declaró Tarazona a los medios.

La esposa de Uribe Turbay expresó -además- su rechazo a «cualquier acto de violencia o cualquier acto de venganza por la muerte de Miguel» porque, aseguró, «para honrarlo solo debe haber amor en los corazones».

«Ojalá se haga justicia porque la justicia fortalece la democracia (…) Debe haber justicia no solo por Miguel sino por una Colombia entera que merece vivir en paz», señaló Tarazona, quien también agradeció al equipo médico que «luchó a la altura de Miguel» hasta «el último minuto» en la Clínica Santa Fe de Bogotá, donde el político estuvo ingresado desde el atentado del 7 de junio pasado.

Antes de entrar al Salón Elíptico, Julio César Turbay Quintero, tío del senador, también expresó su «dolor y tristeza» en este momento en el que, aseguró, hay que «luchar para evitar los odios, por la paz y el entendimiento».

«Dejemos a un lado los discursos incendiarios y la convocatoria a la confrontación», apeló el tío y también exparlamentario.

Entre las personas presentes en el velatorio, que hoy será solo para familiares y amigos cercanos antes de abrirse al público general a partir del martes en la mañana, también estaban varios concejales del Centro Democrático, el abogado de Uribe Turbay, Víctor Mosquera, y el precandidato presidencial Juan Daniel Oviedo, entre otros.

Dos días de velación

La esposa del asesinado precandidato a la presidencia de Colombia Miguel Uribe Turbay, Claudia Tarazona (i), al saludar al expresidente de Colombia César Gaviria este lunes, 11 de agosto, durante el velorio del senador, en el Salón Elíptico del Capitolio Nacional, en Bogotá (Colombia). EFE/Carlos Ortega

Según informaron previamente las mesas directivas del Senado y la Cámara de Representantes, en un comunicado, el féretro de Uribe Turbay permanecerá en cámara ardiente en el Salón Elíptico hasta el mediodía del miércoles, cuando será trasladado a la Catedral Primada de Colombia para las exequias.

En ese mismo Salón Elíptico se rindieron homenajes a su abuelo, el expresidente Julio César Turbay (1978-1982), fallecido el 13 de septiembre de 2005 a los 89 años, y muy recientemente a su abuela, Nydia Quintero, quien murió el 30 de junio de este año a los 93.

El atentado contra Uribe Turbay dividió a Colombia sobre cómo enfrentar la inseguridad en el país, especialmente en un año electoral, y recordó a muchos la violencia política de los años 80 y 90 del siglo pasado, cuando varios candidatos presidenciales fueron asesinados por grupos ilegales que buscaban sembrar miedo e influir en la política nacional.

La muerte del político fue repudiada por varios líderes y gobiernos internacionales y calificada como una «derrota de Colombia» por el presidente Gustavo Petro, de quien Uribe Turbay, desde su escaño en el Senado, fue un férreo opositor.

En memoria del senador, el Gobierno decretó un día de duelo nacional e izó a media asta la bandera en la Casa de Nariño, sede del Gobierno.

Vista general del Salón Elíptico del Capitolio Nacional durante el velorio del asesinado senador y precandidato a la presidencia de Colombia, Miguel Uribe Turbay, este lunes, 11 de agosto, en Bogotá (Colombia). EFE/Carlos Ortega