Madrid, 5 mar (EFE).- La expresidenta de ADIF Isabel Pardo de Vera ha declarado en el Tribunal Supremo que el exministro José Luis Ábalos se interesó por el proceso de contratación de algún puesto administrativo en Ineco, donde fue contratada su expareja y el hermano de su exasesor.

Según han informado fuentes jurídicas, la también ex secretaria de Estado de Transportes ha mencionado que tanto Ábalos como su exasesor Koldo García le hablaron de algún puesto administrativo y sobre si en Ineco necesitaban refuerzo.
La testigo, que ha negado que Ábalos le pidiese directamente alguna gestión para contratar a su expareja, ha señalado que ella simplemente les explicó el procedimiento de contratación, que había ofertas públicas y oposiciones y que ella no podía contratar a nadie que no se suscribiese a una oferta.
Pardo de Vera, que ha declarado este miércoles como testigo en la causa abierta a José Luis Ábalos, también ha relatado que el exministro y su exasesor se interesaron en una ocasión por dos empresas -Levantina y Murias- contratadas por ADIF, debido a que estas se quejaban de pagos pendientes, si bien ella revisó toda la documentación y comprobó que todo estaba correcto.
La expresidenta de ADIF, que ha negado que De Aldama le hablase nunca de ninguna obra, ha comentado que no entendía por qué Koldo García tenía que preguntarle sobre eso.
Como hizo también en la Audiencia Nacional, ha explicado la adjudicación de un lote de mascarillas por 12,5 millones de euros a la empresa Soluciones de Gestión en 2020, y ha dicho desconocer por qué se adquirieron cinco millones de mascarillas porque a ella le llegó una orden ministerial del ministro, según las fuentes.
De acuerdo a las fuentes, Pardo de Vera también ha indicado que en algún momento comentó al ministro por qué el empresario Víctor de Aldama estaba tanto en el Ministerio, en un espacio restringido, y que después no volvió a verle más.
Tras ella, al director general de Carreteras entre 2018 y 2022, Javier Herrero, le han preguntado por la hoja de Presupuestos Generales de 2021 que presentó Aldama con subrayados y que, según dijo, podrían ser obras preadjudicadas.
El testigo ha indicado que se trata de un documento habitual, que está en el Boletín Oficial del Estado (BOE), y que desconoce de quién es la letra.
Herrero ha negado haber percibido nada irregular por parte de ningún funcionario o constructora, o haber recibido ninguna indicación del exministro, que le dio libertad para trabajar. Tampoco tuvo ninguna relación con De Aldama.
Sí que conocía a Koldo García, como asesor de Ábalos, con quien trató fundamentalmente para asuntos de logística, según las fuentes.
También han testificado un ex oficial mayor del Ministerio de Transportes y el constructor Manuel Contreras, presidente del grupo Azvi, quien ha explicado que contrató en 2023 a Koldo García para abrir mercado en Sudamérica. Cobró 6.000 euros al mes durante tres meses y 25.000 euros por gastos adelantados.
Contreras intentó querellarse contra De Aldama por las acusaciones vertidas contra su empresa sobre el presunto pago de comisiones a cambio de contratos públicos, si bien el Supremo se lo denegó en este momento al considerar que las manifestaciones del presunto conseguidor no están hasta ahora “mínimamente contrastadas”.
Aunque ha dicho conocer a De Aldama, no tiene ningún relación con él, y ha explicado que se reunió alguna vez con el director general de Carreteras en el Ministerio a petición suya, pero nunca por intermediación de este empresario ni de Koldo García, según las fuentes.
Los testimonios de este miércoles ponen fin a la ronda de testigos que programó el magistrado Leopoldo Puente, a la espera de los informes que solicitó a la Guardia Civil, uno de ellos sobre el patrimonio del exministro Ábalos y de su hijo.