Valladolid, 6 may (EFE).- Familiares y amigos de Esther López, la joven cuyo cadáver apareció hace más tres años en el municipio vallisoletano de Traspinedo, se han concentrado este martes frente a los juzgados de Valladolid para reclamar la apertura de juicio oral contra Óscar S.M., el único investigado en el caso.
Ha sido una concentración en torno a una pancarta en la que se podía leer “Sin justicia no hay descanso. Justicia para Esther”, a la que han acudido una quincena de personas a primera hora de este martes, con motivo de la declaración, a petición de la defensa, de los guardias civiles y voluntarios que batieron el área en la que se encontró el cuerpo de López, el 5 de febrero de 2022.
La hermana de Esther López, Inés, ha reconocido en declaraciones a los periodistas que espera que la siguiente vez que vea a los informadores “no sea en las puertas de los juzgados” sino dentro de la Audiencia Provincial, ya que a su juicio “la instrucción está más que cerrada”.
También ha opinado que “todas las pruebas que hay objetivas, que son ciencia y tecnología” se han reflejado en “un informe con datos objetivos con los equipos más preparados de este país”.
A su juicio, es “un informe con nombre y apellidos del asesino” de su hermana, y ha incidido en que su deseo es verle “entre rejas”, que “ya toca” después de más de tres años y medio.
Preguntado por el impacto que tiene el proceso judicial en los familiares de la joven, Inés López ha reconocido es “demoledor” y “es muy duro”, ya que arrasa por todos lados, aunque ha subrayado que “va a estar hasta el último momento en pie luchando por una sola cosa, la verdad, que es la que le han comunicado y han plasmado en un informe”.
A petición de la defensa de Óscar S. M., este martes testificarán los once guardias civiles y cuatro voluntarios encargados de rastrear los sectores 2 y 3 de la localidad de Traspinedo durante las batidas que se realizaron desde mediados de enero de 2022 hasta que apareció el cadáver de la joven, unas semanas después.
Entre ellos, José María R.C., el fontanero de Salamanca que halló el cadáver de Esther López en una cuneta, que se encontraba en una vía de acceso al municipio cercana al polígono ‘Tuduero’, y que prestará declaración a través de videoconferencia.
