Vigo, 19 sep (EFE).- La fiesta del cine irreverente y gamberro vuelve durante una semana a Vigo con la inauguración este viernes de la novena edición del Galicia Freaky Film Festival (GFFF), un certamen internacional de cine y cultura ‘freak’ que, en palabras de sus organizadores, promete «liarla parda» en las salas.
Más de 70 cortometrajes «fuera de lo normal» procedentes de 24 países participan este año a concurso en la sección oficial del festival, que busca la interacción con el público y disfrutar del cine en comunidad en un ambiente festivo y distinto al habitual.

Películas que te derritan los sesos
En palabras de su director, Juan de Castro, el cine ‘freak’ «va un poco más allá de lo que es lo fantástico o el terror», incluyendo «lo surrealista, lo impresionante, lo pasmoso, lo que te deja con el ‘culo torcido’ o con las ‘neuronas fritas'».
«Buscamos que nuestras películas te derritan los sesos, con giros de guiones que no ves venir, historias muy locas. Tenemos mucha animación, porque la animación permite poner en una pantalla en imagen cualquier sueño, todo puede ser posible», dice en declaraciones a EFE.
Eso es lo que, a su juicio, diferencia al GFFF, además del ambiente que se vive en las salas y en la llamada Videodrom, una cueva-guarida o punto de encuentro en la que el público podrá disfrutar de exposiciones de pintura, fotografía o cómic ‘freak’ y charlar con realizadores y organizadores, mientras se «mama a cervezas».
«Prepárate para que tu cordura se deshaga ante la pantalla, mientras Vigo se convierte en el epicentro mundial del cinema ‘underground’ más alocado. Pesadillas, alucinaciones y carcajadas imparables garantizadas», anuncia la página web oficial del certamen, el único que subtitula todos sus cortometrajes al idioma gallego.
Esta noche se inaugura el festival con la esperada presencia del alcalde de Vigo, Abel Caballero, uno de cuyos emblemas municipales, el Dinoseto, un arbusto en forma de dinosaurio que se exhibía en el centro de la ciudad, ha servido de inspiración para los premios.
«Nuestra estatuilla es un dinosaurio defenestrado, moribundo, con la lengua fuera. Siempre buscábamos una manera de matar al Dinoseto, porque es horroroso», reconoce De Castro, que procede del mundo de la ingeniería y la arquitectura.
Un festival para que el público interactúe
Y para la inauguración habrá una sesión doble, casi en desuso en la actualidad, con dos comedias: ‘El jovencito Frankestein’ (1974), de Mel Brooks, y ‘La novia de re-animator’ (1990), de Brian Yuzna.
Una primera sesión para la que ya se han agotado todas las entradas, igual que para la de clausura el 27 de septiembre, en la que se proyectará una película legendaria del género que creó una nueva forma de ver cine con la participación activa del público: ‘The Rocky Horror Picture Show’, de Jim Sharman, de cuyo estreno se cumplen 50 años.
«Esa película es una celebración y la gente podrá interactuar con ella, lanzar serpentinas, aplaudir, gritar, toda la liturgia», anuncia el director del festival y advierte que los espectadores «vírgenes (que no la hayan visto) serán marcados antes de entrar en la sala».
Entre las novedades de esta edición, el certamen hará un homenaje a Luis Barboo (1927-2001), un vigués que fue actor secundario y especialista en Hollywood, junto a estrellas como Clint Eastwood, Kirk Douglas o Charlton Heston.
Barboo, descendiente de Pepe Bar (fundador del Celta), tuvo su papel más destacado encarnando al personaje El Rojo en ‘Conan, el bárbaro’, que el festival proyectará en su homenaje.
«Es un desconocido al que nuestro festival quiere homenajear y ensalzar porque el cine, sin todo ese personal de currantes, no sería lo mismo», destaca De Castro.
Otra de las novedades será el concurso de tapas ‘freaks’, que varios bares de Vigo servirán durante los días del festival, hechas «con una reminiscencia fantástica o de terror» para que la «la gente disfrute y se involucre».
Además de los premios del jurado internacional, el público podrá escoger también estos días los mejores cortos de humor, para otorgar el Premio Escarállome, o el film más raro o esperpéntico, que se llevará el Premio Neuronas Fritidas.
Xavier García