La ilusión por el Mundial de Clubes no despierta al Real Madrid de su largo letargo

El nuevo entrenador del Real Madrid, Xabi Alonso, debutó este miércoles con un decepcionante empate 1-1 con el Al Hilal en Miami (Florida). EFE/EPA/CRISTOBAL HERRERA-ULASHKEVICH

Miami (EE.UU.), 18 jun (EFE).- El deseo que han transmitido varios miembros de la expedición del Real Madrid por estar dispuestos a darlo todo para ganar el Mundial de Clubes FIFA, chocó este miércoles con lo reflejado sobre el terreno de juego en el debut contra Al Hilal, que no pasó del 1-1.

«Los jugadores se dejarán el alma para conseguir el Mundial de Clubes», había dicho el presidente madridista, Florentino Pérez, hace una semana antes de viajar a Estados Unidos.

Pero lejos estuvo hoy el carácter demostrado por los jugadores del que suelen mostrar en las grandes noches europeas donde salen enchufados desde el inicio.

Ni siquiera la mayoría blanca en las gradas y el apoyo a algunas de las principales estrellas del Real Madrid, como Luka Modric o Vinicius, sacó al conjunto español de la larga pesadilla que esta siendo esta temporada, y el inicio de la etapa de Xabi Alonso como entrenador empezó de forma muy similar a como acabó el capítulo Carlo Ancelotti.

Así, el corrillo que hicieron los once titulares antes del pitido inicial intentó transmitir una sensación de unidad y de seriedad por este nuevo reto que supone el Mundial de Clubes, pero eso tardó en verse en el campo.

Apenas tardó dos minutos Al Hilal en inquietar a Thibaut Courtois, quien tuvo que estirarse a su derecha para detener un disparo cruzado de Sergej Milinkovic-Savic. En el minuto 10, una segunda jugada dentro del área madridista concluyó con otro disparo de Marcos Leonardo, ante el que no pudo reaccionar el guardameta, pero que se marchó fuera.

El Real Madrid volvía a salir dormido a un partido, uno más en esta temporada que terminó sin ninguno de los tres títulos grandes.

Apático, falto de ritmo e ideas y con un centro del campo más bien inexistente, cuyo objetivo principal es llevar el balón a Rodrygo o Vinicius -ante la ausencia hoy de Kylian Mbappé- y esperar a que aparezcan los espacios sin antes haberlos generado.

El propio Vinicius destacó la importancia de ganar esta primera edición del torneo, recordando que «del primero la gente nunca se olvida».

Pero su partido estuvo en la línea del resto del equipo. Sí que participó en la jugada del gol madridista, cuando en una salida rápida del Madrid abrió el balón a banda para que Rodrygo sirviera una asistencia al jugador del partido: Gonzalo García.

Como sucedía con Ancelotti, el Real Madrid volvió a encontrar el gol gracias a salidas rápidas, sin necesidad de construcción previa.

Pero como sucedió durante toda la temporada, un fallo de la defensa -de Asencio en esta ocasión- dio lugar a un penalti para el Al Hilal que dio lugar al 1-1.

La voracidad del Madrid por empezar con victoria en el torneo sí se vio en la segunda parte, en la que arrancó con todo el ritmo que no mostró en la primera mitad. La entrada de Arda Guler, llamado a tener este año su campaña de consolidación en el Madrid, dejó un tiro al larguero del turco y otra ocasión que atajó Bono sobre la línea.

La entrada de Lucas Vázquez en el minuto 65, por Alexander-Arnold, así como la marcha de Rodrygo por Brahim, fue una maniobra que bien habría podido formar Ancelotti. El debut del inglés llegaba a su fin ensombrecido por el resultado y el juego general del equipo.

Pese a la mejoría general, de nuevo el Real Madrid se hallaba falto de ideas en tres cuartos.

La gran inversión blanca de este verano, el argentino Franco Mastantuono, es una de las mayores esperanzas para asumir esa tarea, pero seguirá en River Plate hasta que finalice el torneo.

Una de las posibles soluciones es el eterno Luka Modric, quien seguirá el camino contrario al argentino, y se marchará del Madrid una vez concluya el Mundial de Clubes. Precisamente él fue uno de los jugadores más aclamados por la afición del Hard Rock Stadium de Miami, que acabó disfrutando del croata en los últimos diez minutos, cuando entró por Jude Bellingham.

El primer capítulo de la etapa de Alonso concluyó con una defensa muy similar a la de Ancelotti, con Vázquez y Fran García en los laterales y Tchouameni de central, pero con una delantera totalmente inesperada, compuesta por Víctor Múñoz, Gonzalo García y Brahim Díaz.

El problema de los penaltis también se hizo visible hoy en Miami, Federico Valverde desperdició en el descuento desde los once metros la oportunidad de darle al Madrid su primera victoria en el renovado Mundial de Clubes.

El entrenador español tendrá que meter mucha mano en el equipo para implantar sus ideas. El objetivo está un poco más lejos que hace unas horas: convertirse en el primer campeón del Mundial de Clubes.

Hugo Barcia