La inesperada magnitud del revés electoral de Milei desata una tormenta en los mercados

El presidente de Argentina, Javier Milei, habla luego de conocer los resultados electorales de las elecciones legislativas este domingo, en un centro de campaña en La Plata, Buenos Aires (Argentina).EFE/ Juan Ignacio Roncoroni

Buenos Aires, 8 sep (EFE).- La inesperada magnitud de la derrota electoral sufrida este domingo por el partido del presidente Javier Milei desató este lunes una tormenta en los mercados: los títulos públicos y las acciones de Argentina se desplomaron y el precio del dólar estadounidense se disparó.

Los inversores esperaban que la formación de ultraderecha La Libertad Avanza, que lidera Milei, saliera segunda, por detrás del peronismo, en los comicios legislativos en la provincia de Buenos Aires, la más poblada de Argentina.

Los precios de bonos y acciones argentinos al cierre del viernes último descontaban ya un triunfo del peronismo por sobre el partido gobernante por una diferencia de entre tres y seis puntos porcentuales.

Lo que de ningún modo vislumbraron los inversores era una derrota de Milei por 13,57 puntos. El sorpresivo resultado desató una ola de ventas de activos argentinos, tanto en Wall Stret como en la Bolsa de Buenos Aires.

El resultado sienta un negativo precedente para el partido gobernante de cara a los comicios legislativos nacionales del 26 de octubre en Argentina y las posibilidades futuras del Gobierno para avanzar en reformas estructurales en el Parlamento.

«El peronismo bonaerense obtuvo una contundente victoria. Lo esperable era el triunfo, lo sorpresivo fue la diferencia de más de 13 puntos», señaló en un informe la firma Delphos Investment, que vaticinó que «bonos y acciones enfrentarán semanas de debilidad hasta que haya mayor claridad sobre la coyuntura económico-financiera».

El índice S&P Merval se desplomó 13,25 %. Entre las acciones del panel líder, las más castigadas fueron las de bancos y energéticas, con caídas de hasta el 21 %.

Los títulos públicos argentinos en dólares se derrumbaron entre 5,6 % y el 10,4 %, mientras que el índice de riesgo país de Argentina trepó a 1.100 puntos básicos, su nivel más alto desde octubre de 2024.

Elevada presión cambiaria

El terremoto electoral también sacudió al mercado cambiario.

El precio del dólar subió 45 pesos en el estatal Banco Nación, donde cerró a 1.425 pesos por unidad, tras tocar durante la jornada un récord de 1.460 pesos; el valor de la divisa estadounidense también trepó en el mercado informal y en la plaza mayorista.

Aunque el comportamiento de la divisa estadounidense estuvo marcado este lunes por el resultado electoral, las tensiones cambiarias suceden en Argentina desde julio pasado por las crecientes dudas entre los inversores sobre la sostenibilidad del plan económico de Milei, de severo ajuste fiscal y férreo manejo monetario que ha logrado desacelerar la inflación, pero a costa de un enfriamiento de la actividad económica y con problemas no resueltos respecto a la acumulación de reservas monetarias.

Con el valor alcanzado este lunes, el precio del dólar ha acumulado un aumento del 29,8 % desde que el pasado 14 de abril, tras lograr un millonario acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), Argentina flexibilizara las restricciones al acceso de divisas y pusiera en marcha un nuevo esquema cambiario.

De acuerdo con este régimen, el tipo de cambio flota sin intervención del Banco Central mientras se encuentre dentro de una banda, que actualmente es de entre los 951 y los 1.471 pesos por dólar.

En el contexto de las crecientes presiones sobre el dólar, el Tesoro de Argentina anunció hace una semana que intervendría en el mercado cambiario, lo que le llevó la semana pasada a vender unos 500 millones de dólares para intentar frenar el alza del dólar.

«El principal riesgo para el Gobierno pasa por lo macroeconómico. Una suba del dólar al techo de la banda podría interrumpir el proceso de desinflación, deteriorar el humor social y alimentar el voto castigo», advirtió Delphoss, que sostuvo que el Ejecutivo «necesita un giro político».

Este domingo, tanto Milei como el ministro de Economía argentino, Luis Caputo, afirmaron que no habrá cambios en la política económica.

«La pregunta pasa por si el Gobierno logrará reacomodar la situación, tanto a nivel político como a nivel contención de presiones macro, y si podrá o no revertir la imagen actual de derrota de cara a las nacionales de octubre. Las próximas semanas serán clave en todo aspecto, y la cautela inversora deberá primar», afirmó en un informe Juan Manuel Franco, economista jefe del Grupo SBS.

Natalia Kidd