La inmensa mayoría de Cuba sigue sin corriente 12 horas después del nuevo apagón nacional

Una agente de la policía controla el tráfico en la calle este miércoles, en La Habana (Cuba). EFE/ Ernesto Mastrascusa

La Habana, 10 sep (EFE).- La inmensa mayoría de los más de 9 millones de cubanos permanecían sin corriente este jueves doce horas después de que se produjese un nuevo apagón nacional en la isla, el quinto en menos de un año.

Según el director general de Electricidad del Ministerio de Energía y Minas (Minem), Lázaro Guerra, a las 20:00 hora local (0:00 GMT del viernes) el Sistema Eléctrico Nacional (SEN) generaba unos 500 megawatios. Esto supone, en base a datos oficiales, menos de un 15 % de la demanda habitual para esa hora en verano.

Una central de gas de Varadero ya está produciendo energía, mientras que dos unidades de generación térmica en el oeste y el centro del país están «en proceso de arranque» y otras dos, en el este y oeste de la isla, están ya energizadas, el paso previo a su puesta en marcha.

A lo largo de todo el país, explicó Guerra, se han ido ya creando «microsistemas», pequeñas áreas con energía en torno a sitios claves como hospitales y plantas de bombeo de agua, que se prevé ir consolidando, ampliando e interconectando con el paso de las horas.

Se trata de un proceso lento y complicado que puede tener reveses, como sucedió esta tarde en La Habana, cuando los microsistemas creados quedaron de nuevo sin energía eléctrica y hubo que reiniciar la recuperación.

Según la última actualización, la capital cubana, con algo menos de 2 millones de habitantes, contaba a primera hora de la noche con 148.145 los clientes conectados, lo que podría suponer un 30 % de su población.

El primer ministro, Manuel Marrero, indicó en redes sociales que «varias unidades generadoras ya se encuentran funcionando, en proceso de arranque o energizadas, y los microsistemas creados en las provincias continúan asegurando la sostenibilidad de servicios vitales».

«En todo el país se trabaja sin descanso y con mucho compromiso», agregó.

El Ministerio de Energía y Minas (Minem) indicó que la «desconexión total» del SEN, que tuvo lugar a las 9:14 hora local (13:14 GMT) «puede estar asociada a una salida inesperada» de la central termoeléctrica Antonio Guiteras, la mayor unidad de generación del país, ubicada en la provincia de Matanzas (oeste).

Además indicaron que «se investigan las causas» de esta caída del SEN y que las tareas de su restablecimiento requieren de un procedimiento «lento y laborioso» que en las anteriores ocasiones ha demorado días.

Este nuevo corte eléctrico general es el quinto reportado en los últimos once meses y evidencia de la precariedad del SEN. Dos de los anteriores se debieron a la gran precariedad con la que opera el SEN y otros dos al paso de huracanes por la isla.

El fin de semana pasado una avería en un cable de alta tensión dejó durante horas sin corriente a cinco provincias del este de la isla.

 

Empleados de la empresa Eléctrica Nacional (UNE) trabajan en la reparación del sistema eléctrico este miércoles, en La Habana (Cuba). EFE/ Ernesto Mastrascusa

Crisis energética agravada

La crisis energética que arrastra Cuba desde hace varios años se ha agravado considerablemente en los últimos doce meses, lo que se refleja en prolongados apagones diarios con una duración promedio que durante este julio y agosto fue de entre 15 y 16 horas, según la UNE.

Las centrales térmicas cubanas están en su mayoría obsoletas, tras décadas de explotación y un déficit crónico de inversión y mantenimiento; mientras que decenas de motores de generación están a diario fuera de servicio por la falta de divisas del país para importar suficiente combustible.

Expertos independientes señalan que la crisis energética responde a una infrafinanciación crónica de este sector, completamente en manos del Estado cubano desde el triunfo de la revolución en 1959.

El Gobierno cubano culpa por su parte el impacto de las sanciones estadounidenses a esta industria y le acusa de «asfixia energética».

Diversos cálculos independientes coinciden en estimar que el Gobierno cubano necesitaría entre 8.000 y 10.000 millones de dólares para reflotar el sistema eléctrico, una cantidad de la que La Habana no dispone.

Los cortes de electricidad suponen un fuerte escollo para la economía nacional, que se contrajo un 1,1 % en 2024 y suma en los últimos cinco ejercicios una caída acumulada del 11 %, según datos oficiales. La CEPAL también prevé que su producto interno bruto sea negativo este año.

Además atizan el descontento social en Cuba y han estado vinculados a las principales protestas que se han registrado en el país en los últimos años, como las de julio de 2021.