Madrid, 26 jun (EFE).- La inversión extranjera en España para rodajes, servicios de postproducción y efectos visuales cayó un 33,6% en 2024, según los datos recabados por Profilm, asociación que agrupa a las productoras españolas que prestan servicios a proyectos internacionales.
Según estas productoras, que han participado en más del 85 % de los rodajes internacionales realizados en España en la última década, la inversión pasó de 197,4 millones de euros en 2023 a 129,9 millones en 2024, repartidos en 27 proyectos que recalaron en España frente a los 37 del año anterior.
Profilm achaca este descenso a «la pérdida de competitividad de España frente a otros países europeos por falta de ajustes fiscales».
Estos datos se incluyen en el informe anual de la entidad, que se ha presentado este jueves en Barcelona en un acto que ha reunido a representantes del sector audiovisual y de las administraciones públicas, coorganizado con la Catalunya Film Commission, organismo dedicado a atraer rodajes y asesorar a los profesionales.
Además del descenso en inversión, se ha producido una reducción del 16,5 % en el número de contrataciones, que pasaron de 10.747 a 8.510, y un leve descenso en las aportaciones a la Seguridad Social, que bajaron de 17 a 12,5 millones de euros.
El informe muestra un impacto significativo en sectores como alojamiento (13,3 millones de euros de inversión), seguido por alquiler de equipos técnicos (9,1 millones) y gastos de localizaciones (6 millones de euros).
También destacan los servicios asociados a viajes, efectos visuales, ambientación, decorados y transporte.
Canarias y Cataluña se afianzan como polos de atracción de rodajes internacionales.
El informe especifica que, en un contexto general de retroceso, Cataluña triplicó su volumen de inversión con ocho proyectos y 41,3 millones de euros.
Canarias mantuvo su número de proyectos (8) con una inversión de 42,7 millones de euros. La Comunitat Valenciana, impulsada por una gran superproducción, alcanzó los 14,8 millones de euros, mientras que Asturias se incorpora como nuevo destino con dos producciones y cerca de 3 millones de euros de impacto directo.
Baleares pierde protagonismo, con solo 2 rodajes y 6,3 millones de euros en 2024. Y Madrid no registró actividad internacional en este período, en cuanto a los rodajes, según los datos de los socios de Profilm.
El presidente de Profilm, Fernando Victoria de Lecea, ha destacado entre las «posibles causas» de este descenso, que se produce por segundo año consecutivo, que «desde 2022 la mayoría de los países europeos han actualizado y fortalecido sus sistemas de incentivos fiscales para captar un mayor volumen de producciones, y han incrementado su presencia en mercados audiovisuales internacionales».
España, sin embargo, mantiene «un esquema fiscal más rígido, menos reactivo a los mercados competidores y se percibe un amplio margen de mejora en el ámbito de la seguridad jurídica, lo que se manifiesta en algunos retrasos en las devoluciones de las deducciones fiscales internacionales, en proyectos de mayores presupuestos», ha asegurado.”
Por su parte, Francisco Vargas, director del Área Audiovisual del Instituto Catalán de las Empresas Culturales (ICEC) del Departamento de Cultura de la Generalitat, ha subrayado el compromiso del Govern con el sector audiovisual.
Como prueba de ello ha mencionado la reciente licitación para la ampliación del Parque Audiovisual de Cataluña, que sumará dos nuevos platos (6.550 metros cuadrados) y la apuesta por la Cataluña Media City, un gran proyecto de ‘hub’ audiovisual.
