Motril (Granada), 18 ago (EFE).- La Guardia Civil mantiene este lunes un dispositivo de seguridad en las inmediaciones de la iglesia Santiago Apóstol de El Pozuelo, en la pedanía de Albuñol (Granada), donde este domingo fue detenido un joven de 21 años tras acceder al templo y prender fuego al interior del inmueble, causando importantes daños en los enseres de la iglesia.

El presidente de la Diputación de Granada, Francis Rodríguez, ha indicado que «se ven hechos de este tipo en otros rincones de España; creemos que en Granada nunca van a pasar y estamos muy tristes de ver cómo hay personas que no se integran en la sociedad, que no aceptan nuestra cultura, nuestra religión, parte de nuestra esencia».
Rodríguez ha asegurado a los medios que ha conversado con el arzobispo de Granada para trasladarle el «apoyo incondicional» de la institución provincial para buscar recursos económicos para poner en valor los destrozos que se han hecho. «Estamos muy dolidos y esperamos que el autor de los hechos pague con creces lo que ha hecho a todo un pueblo y toda la provincia».
El subdelegado del Gobierno en Granada, José Antonio Montilla, ha mostrado su «apoyo y solidaridad» al arzobispado, a la vez que ha lanzado una advertencia contra los «discursos de odio que pretendan generar enfrentamientos y conflictos entre comunidades».
Montilla ha indicado en un audio remitido a los medios que «en el plazo constitucionalmente establecido, el detenido será puesto a disposición judicial para que se adopten las medidas oportunas», además de recalcar que «los discursos de odio que pretendan generar enfrentamientos y conflictos entre comunidades deben ser rechazados con toda firmeza».
El diputado por Granada de Vox Andalucía, Ricardo López Olea, ha condenado el suceso durante una visita a la iglesia de El Pozuelo, y ha indicado que los hechos no le parecen «ni singulares ni una cuestión anecdótica», ya que «se ha atentado contra las creencias más profundas de los españoles».
López ha afirmado que con este tipo de atentados «se atacan a nuestras raíces, nuestra cultura, nuestra forma de ser y los sentimientos de fe más profundos de la gente de este pueblo y de la nación española».
Ha advertido de «la progresiva islamización que se está produciendo en Europa y en España», ya que hechos como este suponen «una nueva agresión a los valores y a las tradiciones de España por parte de extranjeros que quieren imponer sus creencias con violencia ante la mirada cómplice del bipartidismo del PP y el PSOE».
Según López, defienden que «todo aquel que venga a España debe de hacerlo de forma legal y para adaptarse a nuestra cultura», y por el contrario, los que llegan de forma ilegal «deben ser deportados, al igual que los que se dediquen a delinquir».
Andrés Jesús Maldonado, uno de los vecinos que intentó frenar al joven, ha señalado a los periodistas que el tío del detenido le dijo que su sobrino estaba dentro y lo estaba destrozando todo. «Llamamos a la Guardia Civil y cuando llegaron, no había posibilidad de abrir la puerta, porque había roto la cerradura por dentro, pero entre unos cuantos vecinos y los agentes conseguimos romper la puerta».
«Ha destrozado varias habitaciones y tres santos», ha dicho.
Otra vecina, Mari Carmen, ha indicado que se cruzó con Hassan, el tío del detenido y que fue uno de los vecinos que entró en el templo para intentar apagar las llamas: «Se jugó la vida para sacar a su sobrino y ayudar».
«Llevaba aquí más de un año, yo no lo conozco. Su tío dice que llevaba dos semanas raro y lo mismo necesitaba un tratamiento psicológico», ha destacado esta vecina, que se ha mostrado muy afectada por los daños sufridos por las imágenes del templo.