La principal alianza de guerrillas de Birmania amplía su tregua debido al terremoto

Fotografía de archivo del jefe de la junta militar birmana, Min Aung Hlaing.
EFE/EPA/NYEIN CHAN NAING

Bangkok, 2 may (EFE).- La Alianza de la Hermandad, que aúna a tres poderosas guerrillas étnicas, amplió hasta final de mayo su alto el fuego anunciado para facilitar las tareas humanitarias a raíz del devastador terremoto que azotó a Birmania el 28 de marzo, por el que han muerto 3.835 personas, según cifras de la junta militar.

La tregua declarada por esta alianza, anunciada inicialmente el 1 de abril por el plazo de un mes, se extiende hasta el 31 de mayo “debido a las continuas réplicas y los extensos daños en todo el país”, apuntan las guerrillas en un comunicado conjunto.

“Los esfuerzos de recuperación y limpieza de escombros aún no han sido completamente efectivos, incluso después de un mes. En consecuencia, se necesita tiempo adicional para llevar a cabo estas operaciones relacionadas con el terremoto”, remarca el texto publicado el jueves, cuando vencía el plazo inicial.

La alianza, formada por el Ejército Arakán (AA), el Ejército de Liberación Nacional Ta’ang (TNLA) y el Ejército para la Alianza Democrática de Birmania (MNDAA), lanzó en octubre de 2023 una operación en el noreste del país y que luego se extendió a otras partes del país con serias derrotas a las fuerzas de la junta.

Esta agrupación rebelde, formada por guerrillas de las minorías étnicas rakáin, chinokokang y palaung, ha ganado grandes áreas de territorio a la junta militar birmana, principalmente en el estado Shan (noreste) y en Rakáin (oeste).

El cese de hostilidades en vigor remarca que “no iniciará operaciones ofensivas, excepto en casos de defensa propia”.

Por su parte, la junta militar que detenta el poder desde el golpe de Estado de 2021 confirmó el jueves a EFE que dio por finalizado su alto el fuego aplicado desde el 2 de abril con el pretexto de facilitar la ayuda humanitaria, que expiró la víspera.

La oposición prodemocracia, que también declaró tras el desastre un cese de hostilidades similar, y varias guerrillas étnicas acusan a la junta de haber perpetrado centenares de ataques pese al cese de hostilidades.

“Si el alto el fuego (de la junta) es ampliado o no, no marca diferencias. (La junta) no ha terminado de hablar y ya está apuntando, bombardeando y matando a la población en cualquier lugar. Por eso nadie les cree”, declaró a EFE el portavoz del rebelde Unión Nacional Karen, Pado Saw Tawnee.

El golpe de Estado del Ejército en 2021 puso fin a una década de transición democrática en Birmania y agudizó la guerra de guerrillas que vive el país desde hace décadas. Amnistía Internacional (AI) dijo este martes que el conflicto escaló en el último año y que las autoridades militares emprenden una ofensiva “indiscriminada, desproporcionada y mortífera” contra los rebeldes.