La protesta de jueces y fiscales se convierte en una defensa de la independencia judicial

Jueces y fiscales han realizado este miércoles un paro simbólico de 10 minutos ante los Juzgados de Plaza de Castilla de Madrid, para mostrar su oposición a la reforma de la ley del Poder Judicial y del Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal, convocado por varias asociaciones judiciales y fiscales. EFE/ Daniel Gonzalez

Madrid, 11 jun (EFE).- El paro convocado este miércoles por cinco asociaciones de jueces y fiscales en protesta por las reformas legislativas del Gobierno, que ha contado con un amplio seguimiento en toda España, ha puesto de manifiesto el malestar del colectivo por lo que consideran constantes ataques a la independencia judicial.

A las 12 del mediodía y convocados por la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), la Asociación Judicial Francisco de Vitoria (AJFV), Foro Judicial Independiente (FJI), la Asociación de Fiscales (AF) y la Asociación Profesional e Independiente de Fiscales (APIF), jueces y fiscales han salido a las puertas de las sedes judiciales de toda España y han leído un manifiesto.

En él, han denunciado que la independencia judicial «está bajo amenaza» con las reformas legales emprendidas por el Gobierno, en un ambiente de «continuo ataque al poder judicial y de descrédito de la Fiscalía».

Han pedido la retirada del proyecto de ley que modifica el acceso a las carreras judicial y fiscal y del anteproyecto de reforma del estatuto orgánico del Ministerio Fiscal y han amenazado con acudir a la huelga si no se atiende a sus reivindicaciones.

Esta protesta tiene lugar después de que el Gobierno se mostrara crítico con el auto del juez del Supremo Ángel Hurtado que procesa por un delito de revelación de secretos al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, y que señala que éste habría seguido instrucciones por parte de Presidencia del Gobierno.

La presidenta del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Isabel Perelló, en un acto institucional en Alicante previo a los paros, ha expresado su apoyo a los magistrados del Tribunal Supremo y ha reclamado «el cese de cualquier presión o interferencia en la labor judicial».

El paro ha contado con un amplio seguimiento en el Tribunal Supremo y en la Audiencia Nacional. Más de cien jueces y fiscales, incluido el presidente de la AN, se han sumado a la protesta para mostrar su oposición a la reforma impulsada por el Gobierno.

En la entrada principal del Supremo, en la Plaza de la Villa de París, se han congregado magistrados del alto tribunal como Antonio del Moral, José Luis Requero, Wenceslao Olea y Juan Moya, además de miembros del Gabinete Técnico, algunos con toga en mano, y del fiscal de Sala, Jose Javier Huete.

De la Audiencia Nacional, se ha sumado su presidente Juan Manuel Fernández, además de un buen número de fiscales de Antidroga y de Anticorrupción, entre ellos, el fiscal jefe Alejandro Luzón, y cuatro de los seis jueces centrales de instrucción.

En los juzgados de Plaza de Castilla de Madrid, donde han acudido los portavoces de las asociaciones convocantes, decenas de jueces y fiscales ataviados con togas han acudido a secundar el paro, mientras compañeros de carrera les animaban al grito de «independencia judicial» y «si no hay justicia no hay libertad».

A la convocatoria han acudido, entre otros, el magistrado Adolfo Carretero, que actualmente investiga al exdiputado Íñigo Errejón y que antes investigó el ‘caso mascarillas’ y también han estado presentes, aunque como público, dirigentes como Marta Castro (Vox) o Macarena Olona.

Frente a ellos, un numeroso grupo de ciudadanos han exhibido una pancarta contra Pedro Sánchez y a favor de la independencia judicial.

También el medio centenar de jueces y magistrados decanos de toda España que participan este miércoles en Alicante en unas jornadas nacionales de este cuerpo judicial han secundado conjuntamente al mediodía la protesta.

La Asociación Unificada de Guardias Civiles y el Sindicato Unificado de Policía han mostrado su apoyo a las reivindicaciones de jueces y fiscales y han acudido a las puertas de los juzgados de Plaza de Castilla con carteles en los que se leía «A la UDEF se le respeta, no se le difama».