Madrid, 6 jun (EFE).- Adidas vive momentos de euforia con la selección española. Tiene contrato hasta el 2030 con la RFEF. A nivel mundial, sus ingresos aumentaron un 13 por ciento en el primer trimestre del 2025, casi 700 millones de euros, hasta alcanzar los 6.153 millones de ingresos, según datos de la compañía alemana.
Su patrocinio añadido con Lamine Yamal le permite además expandir su imagen. Y sus botas F50 Elite, que cuestan 250 euros, comienzan a ser un ‘must’, un imprescindible en el mercado, en un contexto de crecimiento para Lamine que le sitúa en el podio de serio aspirante a Balón de Oro, para seguir la estela de Rodri.
La selección de Luis de la Fuente, finalista en la Liga de Naciones, llega a Munich este domingo ante Portugal, con un puñado de futbolistas top -Pedri, Unai Simón, Nico Williams, Mikel Merino…-, que han recuperado el imán del patrocinio en la Federación y que ayuda a posicionarse a marcas como Ebro, histórica enseña española con 70 años de vida, y que ahora vuelve al primer plano tras comenzar a finales del 2024 a producir vehículos en la zona franca de Barcelona, en la antigua fábrica de Nissan, tras su alianza industrial con la compañía china Chery. El contrato con la RFEF se prolongará hasta 2028, prorrogable hasta 2030.
Tras un período inestable en la Federación, la exitosa dirección deportiva de Luis de la Fuente ha devuelto la estabilidad al márketing de la selección, que juntó en la noche del jueves a una media de 5.758.000 espectadores (43,4% de share) en La 1 de TVE en la semifinal ante Francia (5-4).
El minuto de oro, a las 22:54, alcanzó los 7.529.000 espectadores (50,1% de share).
Adidas ya anunció a finales de abril que «los nuevos paquetes de colores y las mejoras de rendimiento para las icónicas franquicias de calzado de la marca, Predator y F50, impulsaron fuertes aumentos en el calzado, mientras que el crecimiento en el negocio de camisetas de la compañía se vio afectado por el gran éxito de ventas de equipaciones antes de los principales torneos del año anterior».
España, con este nuevo equipo repleto de talento, y a pesar de las bajas por lesión de Carvajal y de Rodri en los últimos meses, camina con paso firme hacia el Mundial 2026 y posibilita a Adidas, con un equipo campeón -Eurocopa 2024- atemperar el final de su vinculación con Alemania, su gran altavoz durante el siglo XX y el XXI.
La Federación Alemana de Fútbol (DFB) no renovó su tradicional contrato con Adidas, fortaleza del tejido empresarial germano, y anunció en marzo del 2024 su unión con Nike, su gran competidor, hasta 2034. Nike se convierte así en la primera marca extranjera en vestir y equipar a la selección alemana desde 1954, cuando comenzó una relación que parecía de por vida.
Además de Adidas -sponsor técnico- y de Ebro -socio patrocinador-, otra compañía china -TCL-, con sede en la ciudad de Huizhou, provincia de Guangdong, aparece en el segundo escalón de patrocinios y con gran presencia mediática en las últimas semanas. La marca electrónica -televisores, confort doméstico y dispositivos móviles- tiene contrato hasta el 2026.
