Miami (EE.UU.), 3 sep (EFE).- La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) condenó este miércoles la decisión de la Justicia argentina que prohibió la difusión de unos audios de la hermana del presidente argentino, Javier Milei, al considerarla una forma de «censura previa» y criticó las redadas de las autoridades a los hogares de los periodistas que los divulgaron.
«La medida implica censura previa, prohibida expresamente por la Constitución Nacional de Argentina, así como en la Convención Americana sobre Derechos Humano», dijo -en un comunicado- el presidente de la SIP, José Roberto Dutriz.
El organismo, con sede en Miami, agregó que la prohibición para la difusión de los audios de la secretaria general de la Presidencia de Argentina, Karina Milei, «constituye un precedente negativo para la libertad de expresión y acceso a la información de interés público».
La condena de la SIP llega dos días después de que un juzgado de Buenos Aires dictara medidas cautelares que prohibieron la difusión de los audios de la hermana del presidente.
La orden bloqueó su divulgación «a través de cualquier medio de comunicación de forma escrita y/o audiovisual y/o a través de redes sociales desde todo sitio, plataforma y/o canal web».
La organización también lamentó el allanamiento de las residencias de los periodistas Jorge Rial y Mauro Federico, quienes compartieron los audios, así como la redada contra la sede del medio ‘Carnaval’ para el que trabajaban.
En los audios filtrados se escucha a Karina Milei haciendo referencia a disputas dentro del partido oficialista La Libertad Avanza, cuando supuestamente se hallaba en la Casa de Gobierno.
La filtración de estos audios se produce en medio de un escándalo de corrupción tras la difusión, el pasado 20 de agosto, de otras grabaciones de un funcionario en las que describía un esquema de recaudación de sobornos a través de la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis).
Si bien los audios filtrados el pasado viernes no hacen mención al escándalo de corrupción, el periodista Mauro Federico aseguró contar con cincuenta minutos de audios de la hermana del presidente, según indicó la denuncia presentada el lunes por el Gobierno argentino.
Javier Milei atribuyó la filtración a una «red de espionaje ilegal» integrada por periodistas y que está en contra de su Gobierno.