Múnich (Alemania), 30 may (EFE).- El PSG de Luis Enrique y el Inter de Milán de Simone Inzaghi se refugian antes de la gran final en la superstición, en una serie de datos y curiosidades que van desde el pleno del técnico español en finales hasta el amarillo, no por el color en sí, que vestirán los italianos, pasando por el Allianz Arena de Múnich, estadio que siempre proclamó un campeón nuevo de la competición.
El PSG y el Inter llegan como iguales. Ambos dolidos por una derrota reciente, con ganas de venganza por haber rozado el título. Los parisinos lo hicieron en 2020, cuando cayeron derrotados ante el Bayern de Múnich en el Estadio da Luz de Lisboa. Los milaneses, en 2023, ante el Manchester City en Estambul.
Son los dos equipos que han demostrado ser mejores en Europa. Cada uno a su manera, a su estilo. El PSG aplastando a los ingleses; el Inter dejando por el camino al Bayern y al Barcelona. Los dos optan al título en una batalla que se presenta, de antemano, muy igualada, pero en la que las curiosidades y la superstición también juegan su papel.
Los datos que favorecen al PSG
Porque de las 10 finales que ha disputado como entrenador Luis Enrique, a partido único, sólo ha perdido una, la de la Liga de Naciones de 2021 con el polémico gol del francés Kylian Mbappé por posible fuera de juego, precisamente un partido que se jugó en Milán, en San Siro, casa del Inter.
A doble partido, el asturiano sí perdió una final, la de Supercopa de España ante el Real Madrid en 2016.
El escenario de la final, el mítico Allianz Arena, casa del Bayern de Múnich, esconde un curioso dato que favorece también al PSG. Porque siempre que se ha jugado una final en este escenario, hubo un campeón nuevo.
El Nottingham Forest en 1979; el Olympique de Marsella en 1993; el Borussia Dortmund en 1997 y el Chelsea en 2012.
La única’Champions’ que ha ganado un club francés, la del Marsella en 1993, en este mismo escenario, fue ante un equipo italiano: el Milan.
Y, además, la única final de ‘Champions’ de Luis Enrique como entrenador, al frente del Barcelona, terminó con victoria. Aquí casualidad doble. Fue en Alemania también, aunque en Berlín; y contra otro equipo italiano: la ‘Juve’.
El Inter, de amarillo
Usarán los interistas su tercera equipación, la amarilla. Algo histórico, pues nunca antes el equipo ‘nerazzurro’ jugó un partido tan importante con su tercera indumentaria.
¿El motivo? Todo apunta a la superstición, pero no por el color en sí como pudiera parecer. En España, por ejemplo, el amarillo se asocia a la mala suerte. Pero no es así en Italia, donde el ‘Viola’, el morado, es el considerado como ‘gafe’, pese a que equipos como la ‘Fiore’ no tengan problemas en vestirlo.
De hecho en Italia, ningún actor de teatro, por ejemplo, estrena su obra vestido de ‘viola’, pues se considera que dará mala suerte y será un fracaso.
En este caso es por otra superstición. Y es que la única derrota de los italianos en esta edición de ‘Champions’ llegó con la segunda equipación, la blanca, ante el Bayer Leverkusen. Quedó descartada automáticamente. Con la amarilla, en cambio, dos victorias en Europa.
La principal, la clásica, la de rayas negras y azules, no está disponible al ser el Inter el visitante y coincidir con la vestimenta del PSG.
Tomás Frutos