Barcelona, 17 ago (EFE).- En su primer partido oficial con el ’10’ a la espalda, Lamine Yamal comandó nuevamente al Barcelona hacia la victoria en la jornada inaugural de LaLiga EA Sports frente al Mallorca (0-3), con una asistencia, una expulsión provocada y un gol.
Tras el tanto, el extremo de Rocafonda repitió una celebración que ya había estrenado en la pretemporada: se ciñó una corona imaginaria a la cabeza con ambas manos, al estilo de Lebron James.
Una declaración de intenciones por parte del delantero, candidato al Balón de Oro a los 18 años, después de un verano que ha reafirmado su condición de jugador franquicia del Barça con la renovación hasta 2031 y la adopción del dorsal que engrandeció Leo Messi.
Pero este ascenso en la jerarquía azulgrana -y del fútbol mundial- no parece inquietar a Lamine Yamal, que tras explotar definitivamente el curso pasado y dejar buenas sensaciones en la pretemporada, impuso su catálogo de recursos en el golpeo y el regate ante un Mallorca mermado por las expulsiones de Morlanes y Muriqui en la primera mitad.
Lamine Yamal, superior
Con todo, el encuentro lo encauzó el delantero catalán durante el tramo inicial, aún con igualdad numérica. Encaró y desbordó en varias ocasiones a su marcador, el colombiano Johan Mojica; y cuando este reculó, se inventó un centro al segundo palo para que Raphinha cabeceara el 0-1 en el minuto 7. Una conexión que dio muchas alegrías al Barça la temporada pasada, sin visos de caducidad.
Tras el 0-2 de Ferran Torres, Morlanes vio la segunda amarilla por una entrada sobre Lamine Yamal, en pleno eslalon hacia el área, y el duelo bajó revoluciones con la expulsión de Muriqui en el minuto 39. También lo hizo el ’10’ azulgrana, que se atrevió con una falta directa -algo insólito hace un año, síntoma de su actual estatus- y reapareció para poner el broche a su actuación en el tiempo añadido.
Motivado por el rifirrafe con un oponente, agarró el balón en la banda derecha, amagó el disparo, trazó la diagonal y cruzó un zurdazo a la escuadra más alejada del arco defendido por Leo Román.
Tres estrenos y un toque de atención
La actuación de Lamine Yamal eclipsó los estrenos de Joan García y Marcus Rashford, inscritos pocas horas antes del partido. El portero tuvo poco trabajo, pero transmitió seguridad; mientras que el delantero salió desde el banco, con el encuentro al trantrán, y apenas se hizo notar.
Una distensión generalizada que disgustó a Hansi Flick, como así lo expresó el entrenador tras el partido: «Después del 0-2 y las dos rojas, el equipo ha jugado al 50 %. Pudimos hacerlo mucho mejor. Tenemos que controlar el juego, pero también intentar marcar».
El preparador germano quiere afianzar la voracidad que definió al equipo en su primera temporada, y también mantiene la confianza en La Masia: en Mallorca debutó en partido oficial el lateral izquierdo Jofre Torrents, de 18 años, futbolista de gran proyección.
Araujo empieza el curso como acompañante de Cubarsí
Por otra parte, después de la inesperada marcha de Iñigo Martínez, Flick repitió la fórmula del Gamper en el eje defensivo, con Cubarsí desplazado a la izquierda y Araujo en la derecha en detrimento de Christensen.
Asimismo, el técnico eligió a Ferran Torres -revulsivo principal el curso pasado y goleador en Son Moix- como sustituto del lesionado Lewandowski, y premió con la titularidad a Eric García y Fermín López para reservar a Kounde y Dani Olmo.
Fueron las primeras pistas de los planes de Flick para una temporada en la que el Barcelona parte como candidato a todos los títulos bajo el incipiente reinado de Lamine Yamal. EFE
Xavier Serrano