Las viudas de la tragedia del Rúa Mar al inicio del juicio: «Se podía haber evitado»

Familiares de los fallecidos entran en la Sección 7ª de la Audiencia Provincial de Cádiz. EFE/A.Carrasco Ragel.

     Algeciras (Cádiz), 22 sep (EFE).- Las viudas de los seis marineros fallecidos en el hundimiento del pesquero Rúa Mar, naufragado en el estrecho de Gibraltar en 2020 cuando supuestamente transportaba un alijo de hachís, han expresado su dolor a las puertas de la sede de la Audiencia Provincial de Cádiz en Algeciras en la que este lunes se ha iniciado el juicio.

«Se podía haber evitado», han clamado casi al unísono Milagros Figueroa, Rocío Muñoz y Mari Luz Márquez a los medios de comunicación antes de que se iniciara el juicio contra los seis acusados, que se enfrentan a una petición de condena de la Fiscalía Antidroga de 114 años de prisión por delitos de homicidio, pertenencia a organización criminal, contra la salud, contra los trabajadores, blanqueo de capitales y estafa en grado de tentativa.

Un acusado huido

Los acusados toman asiento en la Sección 7ª de la Audiencia Provincial de Cádiz. EFE/A.Carrasco Ragel.

      Uno de los cinco acusados, Jesús Manuel Heredia, considerado por los agentes de la lucha contra el narcotráfico en Gibraltar el líder del clan de traficantes de hachís de Los Pantoja, será juzgado en rebeldía, pues hace varios meses se fugó de prisión aprovechando un permiso penitenciarios de otra causa.

Él, según el escrito del fiscal, era el «copropietario» de los alijos de hachís que el principal acusado, Pedro Samuel Maza Fernández, armador del barco, introducía desde Marruecos en sus pesqueros.

Pedro Samuel Maza, para quien el fiscal pide la mayor conden,a ya que es el único acusado de seis delitos de homicidios (por los que pide 15 años por cada uno de ellos), su pareja, Macarena R.T, y los otros tres acusados sí se han sentado este lunes en el banquillo de los acusados.

Todos ellos han decidido que no declararan mañana martes, como estaba previsto, sino en la fase final del juicio, que se prolongará hasta, como mínimo, el 8 de octubre.

En la primera jornada del juicio, sus abogados defensores han pedido la nulidad, entre otros aspectos, de las intervenciones telefónicas y de la colocación de un micrófono en un coche que un juez de la Audiencia Nacional había decretado para investigar a una red que se dedicaba a trasladar hachís desde Marruecos a Algeciras, camuflado en pesqueros.

La tragedia que sacudió una investigación

 En el curso de esta investigación sucedió la tragedia del Rúa Mar, hundido a las 1:30 horas de la madrugada del 23 de enero a 28 millas (unos 50 kilómetros) de cabo Espartel (cerca de Tánger).

Tras el hundimiento se inició un amplio dispositivo por tierra, mar y aire, para localizar el barco y a sus tripulantes. Los cadáveres de dos de ellos fueron recuperados en la costa, pero otros cuatro desaparecieron en el mar.

Días después aparecieron flotando en el mar dos fardos de 25 kilos cada uno de ellos de hachís, que según la fiscal, eran los que transportaba el barco y se supo que la Audiencia Nacional investigaba a su armador como parte de una red de narcotráfico.

   En las puertas de la Audiencia en la que se celebra el juicio, las viudas de los fallecidos han negado tajantemente que ellas o sus maridos fueran conocedoras de que el barco trabajaba en algo más que la pesca y han criticado que el armador no alertase aquel día de que había una avería.

   «No los ayudaron. Había una avería y no fueron a por ellos», afirma Milagros Figueroa.

    «Lo único que pedimos es justicia, que ya está bien, que son cinco años y ocho meses», dice Mari Luz Márquez.

La tres viudas acusan al armador de convencerlas para que no se pusieran en contacto con nadie aquella madrugada.

«Nos avisaron sobre las tres de la mañana. Me dijeron que bajara de mi casa, bajé, y me comentó el armador que había saltado la radio baliza, pero que no pasaba nada, que no llamara a los familiares y le hice caso», recuerda Milagros Figueroa.

«A mí también me dijo que no avisara a nadie. No entendemos de barcos, ni de radio baliza. Nos dijeron que no avisáramos a nadie y le hicimos caso», añade Mari Luz Márquez.

   «Que se haga justicia, pero que cumplan lo que tienen que cumplir. Lo que le echen, que lo cumplan, no que le echen 120 años y luego cumpla 25. Que cumpla los 120», añade.

Una reclamación a la que se une otra de las viudas, Mari Luz Márquez: «Que lo cumplan, tanto él como su mujer, que también es cómplice y culpable».

El juicio se reanudará el próximo miércoles.