Lima, 11 jul (EFE).- América Latina y el Caribe debe repensar el futuro de la agricultura para lograr un sector más sostenible y verde, pero a la vez más productivo, sostuvo este viernes Muhammad Ibrahim, candidato por Guyana a dirigir el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA).
«El IICA tiene que promover la innovación tecnológica de una agricultura más moderna, basada en instrumentos digitales. Hoy en día está avanzando mucho la inteligencia artificial, pero con una visión sistémica, entendiendo que tenemos que repensar el futuro de los sistemas de agroalimentación», indicó Ibrahim a EFE en Lima.
El experto, que también se ha desempeñado como director general del Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza (Catie), explicó que la región tiene que encontrar «una nueva narrativa de la agricultura» que explore un sector más centrado en la salud y nutrición de las personas, y a la vez, orientado hacia las energías renovables.
Ibrahim se postula para ser el próximo director del IICA, una institución que tiene la función, a través de la gestión de conocimiento, de promover políticas públicas para lograr una agricultura sostenible y asegurar la seguridad nutricional y alimentaria del continente.
En este contexto, el experto señaló que el instituto juega «un rol importante» para trabajar en conjunto con los gobiernos e ir formando una nueva generación de políticas agrícolas que tomen en cuenta los retos que el sector agrícola está enfrentando hoy en día.
Especialmente en un contexto donde existen retos ambientales, con graves impactos de sequías e inundaciones, y económicos, como el incremento de los costos de producción en las cadenas de suministros.
Tras reunirse con el ministro de Desarrollo Agrario y Riego de Perú, Ángel Manero, el experto sostuvo que, si es escogido director del IICA en noviembre, dará importancia a impulsar políticas públicas que promuevan las buenas prácticas agrícolas y mejoren la producción, pero al mismo tiempo, que tengan el menor impacto posible en el medio, cuidando los recursos naturales.
Ibrahim también destacó su larga experiencia en la elaboración de programas de corporación técnica en diferentes ámbitos del sector, siempre orientados en las amenazas del cambio climático.
Pero además del ámbito técnico, también opta por incluir proyectos de inclusión agrícola y agricultura familiar.
«Sabemos que hay un envejecimiento de los productores y, por lo tanto, hay que buscar el plan de sucesión de quiénes van a ser las próximas personas que liderarán la producción agrícola», agregó.
Agricultura circular

Otro de los puntos que el experto subraya en su candidatura es el cambio de paradigmas para avanzar hacia una agricultura regenerativa, así como transformar los sistemas de alimentación para responder las demandas que los consumidores están buscando.
«Enfatizamos una agricultura y economía circular, donde exista la reutilización, promoviendo más segmentos y cadenas de producción», apuntó.
Un ejemplo de economía circular es la que pueden protagonizar los productores de maíz, que tras cosechar pueden aprovechar los restos y producir biofertilizantes o biocombustibles como el etanol. Gracias a ello, puede tener mayor diversidad de ingresos.
De esta forma, el IICA ayuda tanto a los países miembros a impulsar políticas con estos objetivos, que incluyan incentivos para los agricultores, así como a los productores. En el caso de estos últimos, el apoyo llega para que lleven a cabo prácticas que mejoren su productividad y, al mismo tiempo, cuiden del entorno.
También los impulsa a fortalecer sus capacidades técnicas y los empodera para conseguir acceso a créditos y expansión comercial.
«El IICA está ayudando a los países a impulsar evidencias y bases científicas para que tomen decisiones, y ofrecerles razones para promover prácticas sostenibles», concluyó Ibrahim. EFE
