Madrid, 19 mar (EFE).- Las lluvias han dado este miércoles una ligera tregua en la mayor parte de España a la espera de las precipitaciones y el fuerte viento que traerá mañana la borrasca Martinho, después del temporal causado por Laurence, que deja dos muertos en Sevilla y un desaparecido en Málaga, con ríos desbordados.
El Mediterráneo, sobre todo puntos de Cataluña y la Comunidad Valenciana, han sufrido aún hoy chubascos intensos debido a la borrasca Laurence, mientras el resto de la península todavía siente los estragos de las lluvias de esta semana, especialmente debido a la crecida de cauces.
En Andalucía, el temporal ha dejado dos muertos, a la espera de confirmar la identidad de una tercera persona hallada sin vida en la provincia de Córdoba, ha indicado la Delegación del Gobierno en un comunicado.
Los fallecidos son un matrimonio que se desplazaba ayer martes en un vehículo arrastrado por la subida de un arroyo en Constantina (Sevilla), donde el Ayuntamiento ha decretado dos días de luto oficial.
El cuerpo sin vida de la mujer fue hallado el martes por el dispositivo de emergencia, y hoy se ha encontrado el cadáver del hombre al conseguir mover el vehículo.
Además, en Málaga se busca a un motorista que ha sido arrastrado por la corriente del río Genal.
Andalucía suma cientos de evacuados y numerosos rescates por un temporal que ha puesto más al límite los caudales de los ríos y que mantiene diez afluentes del Guadalquivir en el umbral rojo de alerta.
Sí que ha mejorado la situación del propio Guadalquivir, que ayer llegó al nivel de desbordamiento a su paso por Córdoba pero este miércoles ha descendido al umbral naranja.
La mejora de la situación ha permitido reabrir al tráfico el tramo cortado de la autopista Sevilla-Cádiz (AP-4), aunque una decena de carreteras de la red secundaria andaluza siguen cortadas, y se han retomado las actividades lectivas en Málaga.
Además, la lluvia caída este mes permitirá a los comités de sequía andaluces, que se reunirán la próxima semana, relajar las restricciones sobre abastecimiento y regadío.
Pero Andalucía no baja la guardia y la Junta ya ha anunciado que pondrá en marcha un plan especial en las localidades sevillanas de El Palmar de Troya y Cantillana por el alto riesgo de inundaciones ante la llegada de Martinho.
El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha abogado hoy por la “coordinación y prudencia” ante la previsión de fuertes lluvias a partir de mañana por la nueva borrasca, la cuarta de gran impacto que llega al territorio en los últimos días.
Martinho traerá rachas de viento de hasta 100/110 kilómetros por hora en puntos de la mitad norte peninsular y lluvias en casi toda España.
El día que empieza la primavera, estarán en aviso naranja (riesgo importante) por viento Asturias y Cantabria y por mar combinada Galicia.
Las precipitaciones de esta nueva borrasca afectarán sobre todo al suroeste peninsular, es decir, Andalucía, Extremadura y Castilla y León, según las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
La Junta de Extremadura ha activado este miércoles la fase de emergencia en situación operativa 0 del plan especial por riesgo de inundaciones en toda la comunidad y el nivel 1 para el término municipal de Badajoz, ante las previsiones de desembalse e hidrológicas y meteorológicas para los próximos días.
El Ayuntamiento de Mérida ha pedido no transitar cerca del río por la crecida del Guadiana, en cuya cuenca hay ocho presas y un azud aliviando agua, según la Confederación Hidrográfica.
La crecida de arroyos y ríos ha afectado a algunas viviendas urbanas, casas de campo y caminos rurales de las comarcas de Vegas Altas y La Serena.
Cerca de 450 personas han sido evacuadas en los municipios madrileños de Móstoles y Arroyomolinos por prevención ante posibles inundaciones del poblado chabolista de Las Sabinas, al borde del río Guadarrama.
En Castilla-La Mancha, donde ayer se mandó una alerta a los móviles de los residentes en seis municipios ribereños del río Alberche, el Tajo ha vuelto al umbral rojo a su paso por Talavera de la Reina.
Y en Castilla y León, en la cuenca del Duero están en alerta amarilla tres tramos del Adaja y otros tantos del Duero, el Moros y el Tera.
Para el viernes y el fin de semana, las previsiones del tiempo apuntan a que la borrasca Martinho se sitúe al norte del país ya más debilitada, y el temporal iría amainando, aunque es probable que continúen aún las lluvias para entonces. EFE
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