Berlín, 27 jun (EFE).- Los líderes designados del Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD), Bärbel Bas y Lars Klingbeil, subrayaron este viernes al comenzar el congreso federal de la formación la necesidad de apostar, en conjunción con la diplomacia, por la fortaleza militar, en respuesta al grupo que critica lo que consideran una estrategia de confrontación con Rusia.
El tema de la seguridad tampoco es fácil para ella, admitió Bas en su discurso a los delegados, pero en los tiempos actuales junto a la diplomacia también hace falta fuerza militar.
Además, la actual ministra de Trabajo recordó que la abrumadora mayoría de los militantes del partido ratificaron en mayo los planes contenidos en el acuerdo de coalición con los cristianodemócratas.
Klingbeil, vicecanciller y ministro de Finanzas en el Gobierno encabezado por Friedrich Merz, pronunció por su parte un encendido alegato a favor de la solidaridad con Ucrania.
«Todos queremos que la guerra termine, que termine lo antes posible,», afirmó, y defendió la política del anterior canciller, su compañero de partido Olaf Scholz, de apoyar militarmente a Ucrania y explorar al mismo tiempo todas las vías diplomáticas.
También destacó que en el seno del partido debe haber lugar para el debate y la controversia, en alusión al manifiesto firmado por un centenar de miembros diez días atrás, en el que pedían buscar la cooperación y no la confrontación con Moscú.
«Pero os quiero decir claramente: un partido de paz en el año 2025 no es lo mismo que en los años ochenta. Vladímir Putin no es Mijaíl Gorbachov, queridos compañeros y compañeras, y hoy tenemos que hacer todo lo posible para defendernos de Putin», enfatizó.
Klingbeil subrayó que la libertad de Ucrania está vinculada con la seguridad europea y que como político tiene la responsabilidad de hacer todo lo que está en su mano para que los ciudadanos puedan vivir en paz y seguridad.
«Conmigo no habrá otro camino distinto en lo que respecta a la política de Ucrania de nuestro partido», prometió y agregó que la fortaleza militar es «requisito para poder volver al orden de paz en Europa».
Autocrítica tras las elecciones generales
Los dos líderes designados, que según está previsto serán elegidos por los delegados a lo largo de la jornada, señalaron también la necesidad de hacer autocrítica ante el «catastrófico» resultado de las elecciones generales del 23 de febrero, en las que el SPD apenas superó el 16 %.
Bas apeló a los valores fundacionales de la formación socialdemócrata, como la solidaridad, cuya ausencia, según apuntó, ha afectado la unidad del SPD, o la defensa del Estado social y la igualdad de oportunidades.
Klingbeil reconoció que la debacle no es resultado de errores recientes, sino de los últimos años, o incluso décadas y abogó, como remedio, por enfatizar cuestiones como la redistribución de la riqueza o la lucha contra la discriminación.
Además calificó de «una pequeña revolución» la aprobación por parte del Gobierno de 500.000 millones de euros para inversiones, con la que según dijo se pone fin a la «lucha ideológica» por el déficit cero.
El secretario general designado, Tim Klüssendorf, cuyo cargo también se vota este viernes, habló de un «puñetazo en el estómago» con respecto a los escaños obtenidos por la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), segunda fuerza más votada en las pasadas elecciones generales de febrero (20,8 %) y principal partido de la oposición en la actual legislatura.
«Pero estamos en pie. Aquí y hoy empezamos nuestro regreso», clamó.