Santo Domingo, 20 sep (EFE).- Voluntarios y pescadores se han unido este sábado para retirar los utensilios de pesca que amenazan la vida de los flamencos y otras aves en la playa Las Salinas, al sureste de la República Dominicana, en una de las tantas actividades convocadas con motivo del Día Internacional de Limpieza de Costas.

Los participantes de esta jornada se esforzaron en eliminar las denominadas «redes fantasma», formadas a raíz de desechos de pesca abandonados, como trozos de redes, cuerdas y, especialmente, los peligrosos hilos de nailon, que representan una seria amenaza para la vida silvestre, en particular para las aves, de acuerdo con ambientalistas.

«Este hilo de los pescadores es uno de los que más daño les hace a las aves, porque es transparente y cuando se va al mar o está en la orilla de la playa, las aves no lo ven y se enredan fácilmente con estos desperdicios», dijo a EFE la directora de la organización Grupo Acción Ecológica (GAE), María Paulino, durante la jornada.
Las aves pueden quedar enredadas en estos desechos, lo que les impide volar, buscar alimento o incluso les causa heridas mortales. De hecho, recientemente se registró un caso en el que un flamenco quedó atrapado en un hilo de nailon, lo que resultó en la mutilación de una de sus patas.
«Por eso nuestra inquietud de querer trabajar en esta área donde sabemos que hay mucho material que les hace daño a las especies», agregó Paulino.
Los voluntarios ambientalistas consideran una prioridad crear conciencia entre los pescadores y educarlos en el tema medioambiental, para tenerlos como aliados en la prevención y limpieza de la contaminación del entorno.
Sobre la jornada de limpieza de costas, Danilo Mejía, técnico de aves del Grupo Acción Ecológica, señaló a EFE, que el objetivo es «mostrarle a los pescadores el efecto que esto produce» como por ejemplo, «el nailon se adhiere en las aves y estas mueren, por lo menos la mayoría, en el caso de los flamencos».
En iguales términos se pronunció el dirigente de la Asociación de Pescadores de la zona, Juan Ramón Santana, quien señaló que «cada persona que vive en una comunidad debe velar por los recursos naturales y el ecosistema».
En República Dominicana, cada vez son más comunes las jornadas de limpiezas de playas, por lo que es común ver a miembros de diversas instituciones públicas, privadas y centros educativos, recolectando desechos en las playas.
«Si esos operativos no se hicieran, aquí estuviera lleno de plásticos», señaló el pescador.