Oviedo, 27 ago (EFE).- Varias decenas de vecinos de Villamayor y Villarcebollín, dos pequeños núcleos del concejo de Ibias, en el suroccidente de Asturias, continúan desalojados sin poder volver a sus casas por un incendio desatado ayer por la tarde que se propagó con gran rapidez y que, con la ayuda de cortafuegos y de las pistas forestales existentes, ha podido ser anclado en muchas partes durante la noche.
Según ha señalado el presidente del Principado, Adrián Barbón, que se va a desplazar durante la mañana hasta Ibias para conocer de cerca la situación, la red de cortafuegos que hay en el municipio y las pistas forestales, que se han repasado, han «facilitado muchísimo» el trabajo de extinción de este incendio, uno de los cuatros que siguen estando activos en el suroccidente de Asturias.
Durante la noche se pudo sujetar el flanco izquierdo del incendio sobre un cortafuego y el flanco derecho se controló parcialmente sobre varios cortafuegos, pero una parte de este flanco ha avanzado hacia una zona de difícil acceso por debajo de los núcleos de Villamayor y Villarcebollín, informa el Servicio de Emergencias del Principado (SEPA).
La primera llamada a la sala del 112 informando del incendio fue a las 18:04 horas de ayer y, de inmediato, a causa de la rápida propagación del mismo, se decidió actuar sobre núcleos situados en un radio de cinco kilómetros en torno a San Antolín, donde se inició el fuego, por lo que se procedió a la evacuación preventivamente estas dos aldeas y a decretar una evacuación voluntaria de los núcleos de Dou, Andeo, Piñeira y Centenales.
Según ha confirmado a EFE la alcaldesa de Ibias, Gemma Álvarez, hoy aún siguen desalojados los vecinos Villamayor y Villarcebollín, mientras que en Piñeira pudieron volver a entrar durante la noche.
Ninguno de ellos tuvo que hacer uso de la Escuela Hogar que se había puesto a disposición de los evacuados ya que, según la alcaldesa, todos tienen vecinos, familiares o amigos con los que pasar una noche en caso de necesitarlo.
Algunos de los vecinos, según ha relatado Barbón, tuvieron que se sacados de las aldeas en helicóptero «por carretera, sencillamente era imposible».
El presidente ha aprovechado también para pedir que, cuando se decrete un desalojo se cumpla y se colabore «porque es importante y se hace por la protección de las personas, para proteger la vida de los que están en los pueblos y proteger la vida también de los que están en los operativos, porque no hay que exponerlos a riesgos».
El puesto de mando avanzado desde el que se coordinan las labores de extinción ha sido trasladado desde Degaña hasta Ibias para seguir de cerca la evolución de este incendio, que ha pasado a ser el que más preocupa de los cuatro activos.
En su extinción están trabajando esta mañana cuatro helicópteros, la Brif de Tineo, la Unidad Militar de Emergencias y bomberos voluntarios que se centran en abrir cortafuegos para evitar el paso de las llamas, ha señalado a EFE la alcaldesa, que espera que, con ayuda del tiempo, los focos activos no se descontrolen.
En cuanto a los otros tres incendios que siguen activos en el Principado, los de Somiedo, Cangas del Narcea y Degaña, la «evolución está siendo contenida dentro de lo que era esperable» y están siendo objeto de control para evitar que las llamas puedan reavivarse en los focos que hay activos y que «más o menos están controlados».