Redacción Medioambiente, 3 sep (EFE).- El ritmo de avance hacia la neutralidad climática en la Unión Europea sigue siendo «demasiado lento» y los impactos climáticos como los incendios forestales, que han arrasado casi 400.000 hectáreas este año en España, están debilitando el sumidero natural de carbono en Europa, que sigue subvencionando y financiando combustibles fósiles, según un estudio del Observatorio Europeo para la Neutralidad Climática.
Estas son algunas de las conclusiones del tercer informe sobre el «Estado de los avances de la UE hacia la neutralidad climática», elaborado por el Observatorio Europeo para la Neutralidad Climática (ECNO, en sus siglas en inglés), que se ha publicado este miércoles y en el que los expertos advierten de que el progreso hacia las cero emisiones es aún «demasiado lento» en Europa.
Ante esta realidad, el ECNO subraya la necesidad de incrementar los incentivos financiero y normativos para proteger los bosques, unos espacios «esenciales en la lucha climática».
Brecha de inversión climática
De acuerdo con el estudio, en 2023 la brecha de inversión en políticas climáticas fue de 344.000 millones de euros en Europa, a pesar de las promesas realizadas por la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen, de centrar su segundo mandato en la implementación y fomento de inversiones para el Pacto Verde Europeo.
En ese año, y como consecuencia de la guerra entre Rusia y Ucrania, la UE gastó el doble de esa cantidad en importaciones y subvenciones a combustibles fósiles, mientras que las inversiones en energías limpias disminuyeron.
En 2024 las importaciones de combustibles fósiles aumentaron a casi 400.000 millones de euros, según los autores. Actualmente, la UE depende de las importaciones de gas natural licuado, cuyo mayor proveedor es Estados Unidos.
Por ello, los expertos sugieren «integrar de forma urgente» la agenda climática con la de competitividad industrial, para cerrar la brecha de inversión climática, a pesar de que las propuestas incluidas en la ley Omnibus y el Plan de acción industrial para el sector automovilístico europeo «debilitan el Pacto Verde Europeo y el objetivo de reducción de emisiones».
Advierten, además, de que la inversión pública para el clima afronta varios desafíos después de 2026, con reformas fiscales que incrementarán la presión sobre los presupuestos climáticos de algunos Estados miembros.
Por ello, instan a establecer un «marco de inversión a largo plazo eficaz, bien informado y coordinado» para especificar el papel de la financiación pública y privada.
Reforzar la resiliencia forestal
El investigador del Ecologic Institute de Berlín Jonathan Gardiner señala que el sumidero de carbono de Europa se ha debilitado en los últimos años debido al aumento de incendios forestales.
Los bosques son fundamentales, pero están sometidos a una fuerte presión por la sequía, los fuegos forestales y la creciente demanda de madera, asegura.
En su opinión, «los devastadores incendios en España ponen de relieve la necesidad de reforzar la resiliencia forestal mediante una gestión cercana a la naturaleza que garantice una mayor diversidad de especies arbóreas y estructuras de edad, al tiempo que se fomente la biodiversidad».
Gardiner subraya que, aunque todavía no hay datos exactos sobre las pérdidas por los incendios, «es evidente que se necesitan más árboles creciendo y menos muriendo o siendo talados».
En toda la UE, apunta, las reservas de carbono forestal muestran ciertos signos de recuperación, con un crecimiento aproximado del 1,7 % anual en los últimos cinco años, aunque a un ritmo demasiado lento para alcanzar el objetivo de sumidero de carbono fijado para 2030.
Asevera que «la UE debería desarrollar incentivos financieros y normativos para que los propietarios de tierras protejan, restauren y refuercen los sumideros de carbono forestales» y mejorar los datos forestales, que «siguen siendo débiles», mediante una supervisión más eficaz a través de la propuesta Ley de Monitoreo Forestal, aprovechando las tecnologías más avanzadas como la teledetección”.
Fomento de las energías limpias
El Observatorio señala que, aunque el Clean Industrial Deal, iniciativa europea presentada en febrero de 2025, es «un paso positivo», recomienda desarrollar lo antes posible la Ley de Industria Cero Neto en todos los Estados miembros de la UE, así como revisar las normas de contratación pública para fomentar la innovación y la capacidad de fabricación en tecnologías limpias y estimular la demanda de productos verdes europeos.
Recuerdan los expertos del ECNO que Europa sigue siendo «muy dependiente de materias primas críticas importadas» vitales para tecnologías e industrias que permitirían allanar el camino hacia una economía climáticamente neutra y acelerar la descarbonización, mejorar la competitividad y aumentar la resiliencia económica de la UE.