Madrid, 8 sep (EFE).- Una lección aprendida por los militares que participaron este verano en las labores de extinción de los incendios forestales es la necesidad de mejorar la coordinación con los efectivos de emergencias civiles y que esto puede ser más importante incluso que el hecho de enviar por ejemplo una cantidad excesiva de helicópteros.

Así se lo han manifestado mandos de las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra (FAMET) a la ministra de Defensa, Margarita Robles, durante la visita que ha realizado este lunes a su base de Colmenar Viejo (Madrid), donde ha sido informada del despliegue llevado a cabo durante este verano para ofrecer apoyo a las comunidades autónomas afectadas por el fuego.
Son parte del despliegue realizado por distintas unidades de las Fuerzas Armadas para hacer frente a los incendios que han movilizado a 208 militares de las FAMET con 11 helicópteros que han realizado casi 550 horas de vuelo, principalmente durante el mes de agosto.
Transporte de personal y capacidades, reconocimiento aéreo de zonas afectadas y labores para perimetrar el fuego han sido las principales funciones que han llevado a cabo las FAMET con sus helicópteros desplegados durante la oleada de incendios forestales.
El personal de la FAMET que ha participado en este dispositivo de lucha contra los incendios ha coincidido en señalar «la dureza de esos días por la escasa visibilidad y por la simultaneidad de los fuegos» que se han concentrado en la zona noroeste de la península.
La ministra ha elogiado la labor de las FAMET al ofrecer capacidades adicionales en una emergencia como la vivida este verano.
«Una vez más nuestras Fuerzas Armadas han demostrado la importancia del trabajo en equipo y la coordinación para poder dar la respuesta que se les requiere», ha destacado.
Robles ha agradecido el trabajo de su personal pese al riesgo y las dificultades inherentes a esta oleada de incendios, con temperaturas de más de 50 grados en la cabina del helicóptero, así como la entrega y disciplina, ejecutando las pautas requeridas por la dirección técnica de la emergencia.
La ministra, que ha estado acompañada por el Jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra, el general Amador Enseñat, ha recordado que “ha sido una tragedia ante la que una vez más todos los hombres y mujeres de las Fuerzas Armadas han estado a la altura y desde el primer momento».
«Es un orgullo poder contar con todos ustedes, con su profesionalidad y empatía en cualquier momento y situación», ha añadido.
Durante la visita han intervenido dos pilotos que estuvieron en primera línea de fuego, que han manifestado que al llegar sintieron un poco de impotencia por ver que el territorio se estaba quemando y que era «una devastación muy grande» pero también orgullo de poder haber formado parte del dispositivo de extinción y sobre todo de haber ayudado a la población.