Barcelona, 4 sep (EFE).- Los Mossos d’Esquadra llevan a cabo desde primeras horas de la mañana de este jueves en Mataró (Barcelona) un dispositivo, con varias entradas y registros, contra un grupo criminal que compraba móviles robados en toda España y en Europa.
Según han informado a EFE fuentes policiales, se trata de un grupo criminal muy activo que opera en varios puntos de esta localidad barcelonesa, dedicado a comprar a los ladrones los móviles robados, que posteriormente revenden e, incluso, los Mossos investigan que muchos de ellos hayan podido ser utilizados además para cometer estafas tras obtener información de las víctimas.
La Policía de la Generalitat indica que se trata de una banda de receptación de móviles robados de «gran envergadura» por el volumen de su actividad delictiva, aunque no se prevén muchas entradas y registros, ya que aquella está concentrada en unos puntos muy concretos de Mataró, como en un domicilio ubicado en la ronda O’Donnell de esta población.
El dispositivo policial de este jueves es la continuación del ‘caso Baltis’ que, hace un mes, permitió desarticular varios grupos que controlaban en Barcelona el mercado ilícito de teléfonos robados.
En esa primera operación policial del pasado 17 julio, que sería la «matriz» y que tenía su epicentro en el distrito de Ciutat Vella de Barcelona, los Mossos detuvieron a una veintena de personas e intervinieron centenares de dispositivos electrónicos.
En el despliegue policial de este jueves, los Mossos prevén también requisar numeroso material ilícito, según han apuntado fuentes policiales.
La operación la llevan a cabo efectivos de la División de Investigación Criminal (DIC) de Barcelona y de la Unidad de Investigación de Ciutat Vella, y en ella participan agentes de Seguridad Ciudadana de la comisaría de Mataró y de los ARRO.
El operativo se encuentra bajo secreto de actuaciones y se enmarca en el Plan Kanpai de lucha contra la reincidencia.
Los Mossos han destacado que el dispositivo supone un golpe a la receptación, a los multirreincidentes y a las organizaciones dedicadas al robo de móviles ya que su objetivo es evitar que los ladrones puedan colocar de forma rápida los teléfonos sustraídos, así como acabar con las redes que compran y venden esos dispositivos robados.
