Los periodistas nicaragüenses en el exilio viven en precariedad laboral , según un gremio

Fotografía de archivo, tomada el 12 de agosto de 2021, de la última portada impresa del diario nicaragüense La prensa, debido a que el gobierno de Nicaragua decomisó su papel, en Managua (Nicaragua). EFE/Jorge Torres

San José, 03 may (EFE).- Los periodistas nicaragüenses en el exilio enfrentan una situación de precariedad laboral, con bajos salarios y sin acceso a la seguridad social, según un informe divulgado este sábado en Costa Rica por la Asociación de Periodistas y Comunicadores Independientes de Nicaragua (PCIN), con ocasión del Día Mundial de la Libertad de Prensa.

“Ejercer el periodismo desde el exilio implican diversas formas. La primera es el desarraigo, que no es ajeno a la situación que viven miles de nicaragüenses exiliados en Costa Rica y en otros países como Estados Unidos y España” dijo el directivo del PCIN, Julio López, y autor del informe.

“El otro elemento que marca al gremio periodístico nicaragüense en el exilio es la precariedad laboral”, advirtió López, también director de la plataforma Onda Local.

El comunicador anotó que aunque la narrativa oficial y la propaganda del Gobierno que preside Daniel Ortega junto con su esposa, Rosario Murillo, diga “que los medios independientes recibimos millones de dólares, la realidad es sumamente distante de ese discurso, y el periodismo en Nicaragua enfrenta una situación de precariedad”, insistió.

“Tenemos los salarios de Nicaragua en un país que es tres o cuatro veces más caro que Nicaragua”, argumentó López.

Tampoco se tiene acceso a la seguridad social, “porque los recursos son limitados y los medios no tienen la capacidad para poder sostener el pago del seguro social para quienes integran sus equipos”, indicó el periodista.

Los esfuerzos por contrarrestar la narrativa oficial

López valoró, sin embargo, la voluntad y el compromiso de los periodistas para seguir informando desde el exilio, lo que “en muchos casos implica una doble jornada laboral para poder subsistir en un país como Costa Rica”.

“Muchos periodistas, además de ejercer la profesión, tienen que realizar dos o tres trabajos para poder sobrevivir”, afirmó el reportero nicaragüense.

Por otro lado, según el directivo de PCIN, “persiste la autocensura, incluso los periodistas han dejado de firmar sus notas o bien se limitan en la cobertura de algunos temas por el temor a represalias que puede haber hacia la familia”.

No obstante, pese a que “esa es una realidad que enfrentamos todos los días”, López destacó que “tenemos un gremio fuerte, lleno de compromiso, que de otra forma ya hubiese sido doblegado por la dictadura en Nicaragua”.

“El periodismo en el exilio hace un esfuerzo significativo para que en el país no se imponga la censura”, resaltó, el representante de PCIN, quien subrayó que siguen “haciendo un esfuerzo de rescate de la memoria, de documentación, de todo lo que ha sucedido en Nicaragua” en los últimos años.

“Seguimos haciendo una narrativa disruptiva frente a ese intención de la dictadura de imponer un discurso único en Nicaragua”, agregó el comunicador.

 Los retos del periodismo nicaragüense

Los retos para seguir informando, observa López, son la sostenibilidad de los medios de comunicación en el exilio, salir de la precariedad laboral y más estabilidad en las redacciones.

“Se debe lograr que el periodismo en el exilio tenga salarios dignos, con acceso a la seguridad social, con condiciones laborales óptimas, y que no tengan tres o cuatro trabajos para poder sobrevivir”, apuntó el reportero.

López instó a “luchar contra la extinción del periodismo independiente en Nicaragua, porque ya casi la mayoría del periodismo está fuera del país y quienes estamos en el exilio también enfrentamos estos problemas”.

El informe anual de Reporteros Sin Fronteras (RSF) ubicó a Nicaragua en el puesto 172 de la Clasificación Mundial de Prensa 2025, que lo ubica en el fondo de la tabla con peor clasificación, por encima solo de Rusia, Bielorrusia, Cuba y Venezuela.