Los recortes a la ayuda al desarrollo van a sacar a seis millones de niños de las escuelas

Fotografía de archivo de la directora ejecutiva de Unicef, Catherine Russell, durante una conferencia, en Washington DC (EEUU). EFE/Lenin Nolly

Naciones Unidas, 3 sep (EFE).- Los recortes a la ayuda al desarrollo emprendidos por la ONU y por varios países donantes van a tener consecuencias dramáticas en los esfuerzos por la escolarización obligatoria y se estima que en 2026 la cifra de niños que quedarán fuera del sistema escolar aumente en seis millones, de los 272 millones actuales a 278.

Un informe de la agencia de la ONU para la infancia (Unicef), publicado este miércoles, señala que los recortes en el campo educativo van a ser el año próximo del 24 % (3.200 millones de dólares menos). Esos recortes proceden sobre todo (en un 80 %) de tres gobiernos: EE.UU., Alemania y Francia.

De los seis millones de nuevos niños no escolarizados, la tercera parte vive en países en conflicto o que han sido víctimas de desastres naturales; por ejemplo, 350.000 niños rohinyas birmanos refugiados en Bangladés estarán entre ellos.

Con la excepción de Birmania, los países más afectados por estos recortes se encuentran en África del centro y del oeste, el Magreb y Oriente Medio.

La supresión de servicios va más allá de los contenidos puramente educativos; a veces son los comedores escolares los que se quedarán sin fondos y esto privará a los niños de su única comida nutritiva en todo un día; igualmente, se verán afectados los botiquines de ayuda médica esencial.

En total, los recortes van a suponer que 28 países receptores pierdan un cuarto de las ayudas para la educación, ingresos que en muchos casos vertebran el sistema escolar de esas naciones.

«Cada dólar que se recorta en educación no es una mera decisión presupuestaria, es el futuro de un niño pendiente de un hilo», dijo la directora ejecutiva de Unicef, Catherine Russell.

Algunos países como Corea del Sur, España, Italia o Dinamarca han prometido aumentar sus ayudas, pero el monto prometido no compensa las pérdidas que dejan los recortes de los tres grandes donantes citados.