Burela (Lugo), 17 jun (EFE).- Los reyes Felipe VI y Letizia han comprado este martes dos lotes de pescado, uno de merluza de pincho y otro de bonito, en la lonja de Burela (Lugo), que han visitado este martes para conocer cómo funciona el sector pesquero de la comarca gallega de A Mariña.

El rey se ha llevado un lote de merluza por 21,05 euros, mientras que doña Letizia ha conseguido el de bonito por 15,20 euros.

Los monarcas han podido ver de primera mano cómo funciona la lonja de Burela, donde más del 50 % del producto fresco que llega es merluza de pincho, aunque también venden pescadilla, bonito y otras especies.

Hay un sistema que anuncia los precios simultáneamente en una pantalla y por voz, y hoy se ha realizado una simulación para los monarcas, que con un mando cada uno han pulsado cuando el valor ha bajado a la cantidad que les ha parecido razonable.
Los lotes de Felipe y Letizia fueron pescados por el Breogán Uno, que llegó a Burela el pasado domingo procedente del Gran Sol, un caladero del Atlántico Norte.
Los reyes han podido subir al barco, donde sus jóvenes patrones, Noé y Arturo, ambos menores de 30 años, los han guiado por la cubierta para explicarles las artes de pesca.
El puerto de Burela vive de la pesca selectiva, más artesanal, y don Felipe y doña Letizia han conocido también cómo ha evolucionado esta actividad a lo largo de las décadas, ya que previamente han visitado el Reina del Carmen.
Este antiguo barco bonitero, con un casco de madera de 25 metros de eslora, empezó a operar en 1968 y a finales de los 90 fue reconvertido a museo.
El papel de la mujer en la pesca, sector que emplea a 5.000 trabajadoras en España, 4.000 de ellas en Galicia, ha estado muy presente en la visita.
Los reyes han hablado con tres mujeres de la Asociación de Redeiras de Burela, Marta y Mar, madre e hija, y Adelina, que les han explicado la tarea de este oficio, realizado tradicionalmente por mujeres y dedicado sobre todo a reparar las redes de pesca.
También han conocido el trabajo de cuatro estibadoras.
De camino al barco bonitero, los reyes han sido recibidos por varios centenares de vecinos que los esperaban con aplausos y cánticos de «¡Viva el rey!» y «¡Viva la reina!», y algunos de ellos han estrechado la mano con los reyes e incluso se han hecho selfis.
Isabel y Beatriz, vecinas de Burela, han sido dos de las personas que han dado la mano al rey: «Nos parece un aliciente superbueno para el pueblo que vengan», ha explicado Isabel a EFE.
«Así conocen nuestra forma de vivir y de ser», ha coincidido Beatriz.
Entre las personas congregadas estaban también miembros del Comité de Empresa de la fábrica de Alcoa San Cibrao, que han hablado brevemente con Felipe VI y le han entregado una carta pidiéndole una reunión para abordar soluciones para la factoría.
Los reyes han estado acompañados en su visita a Burela por el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, y también han estado presentes el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda; la conselleira do Mar, Marta Villaverde, y la alcaldesa de Burela, Carmela López, entre otras autoridades.