Lula insta a Naciones Unidas a «refundar» la OMC en defensa del multilateralismo

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, al intervenir este martes, 23 de septiembre, durante la 80ª sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas, en la sede de la ONU, en Nueva York (NY, EE.UU.). EFE/Lukas Coch

Naciones Unidas, 23 sep (EFE).- El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, instó este martes a la Asamblea General de la ONU a «refundar» la Organización Mundial de Comercio (OMC), a fin de ponerle coto a medidas «unilaterales» que atentan contra el orden multilateral.

«Hoy, los ideales que inspiraron a los fundadores (de la ONU) están amenazados como nunca antes en toda su historia» y «el multilateralismo está frente a una nueva encrucijada», afirmó el líder progresista brasileño frente al pleno de la Asamblea General.

Según Lula, «en pocas áreas el mundo ha retrocedido tanto como en el sistema multilateral de comercio» en los últimos años, debido a la «arbitrariedad» de medidas unilaterales, señaló en una clara referencia a la guerra arancelaria desatada por el Gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

Esa «arbitrariedad», de acuerdo al líder brasileño, ha «lanzado a la economía mundial a una espiral de precios altos y sanciones, ha desorganizado las cadenas de valor globales» y amenaza con generar más inflación en un mundo desigual.

En ese marco, afirmó que «es urgente refundar la OMC con bases modernas y flexibles» que den cabida a los países en desarrollo, los cuales, añadió, deben tener una mayor representatividad en todos los organismos internacionales, incluida la propia ONU y su Consejo de Seguridad.

La OMC está virtualmente paralizada desde el primer mandato de Trump, quien en 2017 bloqueó el consejo de apelaciones de ese organismo, una medida que luego fue mantenida por el Gobierno de Joe Biden y persiste hasta hoy.

Brasil, un histórico defensor del multilateralismo, apeló sin muchas esperanza a la OMC en agosto pasado, cuando Estados Unidos le impuso a gran parte de los productos brasileños unos aranceles del 50 %, en el marco de la guerra comercial desatada por Trump.

En el caso de Brasil, EE.UU. no ha justificado esa decisión en asuntos comerciales, sino netamente políticos y centrados en el juicio por golpismo que condujo a una condena a 27 años de cárcel contra el expresidente ultraderechista Jair Bolsonaro.

Frente a esos aranceles, el Gobierno de Lula ha ido gradualmente ampliando mercados, a fin de sustituir sus exportaciones hacia la primera economía mundial, que representaban cerca del 12 % del comercio exterior de Brasil.

Lo ha hecho incluso desde el Mercosur, que este mismo mes firmó un acuerdo de libre comercio con la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA), integrada por Suiza, Noruega, Liechtenstein e Islandia.

Ese pacto ha sido considerado como un aliciente para la firma del acuerdo entre el bloque que integran Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, con Bolivia en proceso de adhesión, y la Unión Europea, que se negocia hace 25 años y puede ser suscrito antes de fin de año.