São Paulo, 30 jul (EFE).- El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, convocó este miércoles una reunión con su gabinete después de que el Gobierno de Estados Unidos confirmara el arancel del 50 % e impusiera nuevas sanciones contra el juez de la Corte Suprema Alexandre de Moraes, informaron a EFE fuentes oficiales.
En el encuentro, que tendrá lugar en el Palacio de Planalto, sede del Gobierno brasileño, en Brasilia, está previsto que participen el mandatario progresista y el núcleo duro de sus ministros.
Trump firmó este miércoles la orden ejecutiva que establece un arancel del 50 % sobre las importaciones brasileñas, aunque incluyó cientos de excepciones, entre ellas piezas de aviación, zumo de naranja, minerales y celulosa, sectores con fuertes vínculos con la economía estadounidense.
En su exposición de motivos, el líder republicano afirmó que el Gobierno de Lula constituye «una amenaza inusual y extraordinaria para la seguridad nacional, la política exterior y la economía de Estados Unidos».
También aludió nuevamente al juicio que afronta el expresidente brasileño Jair Bolsonaro por intento de golpe de Estado y que para Trump es un proceso «político» que entraña «graves abusos contra los derechos humanos».
En este sentido, señaló directamente al juez del Supremo brasileño Alexandre de Moraes, instructor de las causas judiciales contra Bolsonaro, incluida la del supuesto intento de golpe.
Para la Casa Blanca, De Moraes abusa «de su autoridad judicial para amenazar, atacar e intimidar a miles de sus oponentes políticos, proteger a aliados corruptos y reprimir la disidencia».
Este mismo miércoles, el Departamento del Tesoro de EE.UU. impuso nuevas sanciones a De Moraes al aplicarle la Ley Magnitsky, que autoriza al Gobierno a sancionar a ciudadanos extranjeros implicados en actos de corrupción o violaciones a los derechos humanos.
Las nuevas sanciones bloquean los posibles bienes y propiedades del magistrado en Estados Unidos y prohíben a ciudadanos estadounidenses realizar cualquier transacción con ellos.
Y se suman a la revocación por parte del Departamento de Estado de EE. UU. de la visa de De Moraes y de sus familiares directos, el pasado 18 de julio.