Lux Pascal espera que el cine español le abra sus puertas tras ser minera en ‘Miss Carbón’

El actor Paco León (c), la cineasta agustina Macri (d) junto a Carla Antonella Rodríguez, la primera mujer trans en trabajar en una mina de carbón en Argentina, durante el photocall de la película "Miss Carbón", este lunes en Madrid. EFE/ Juanjo Martin

Marina Estévez Torreblanca

Madrid, 12 jun (EFE).- Lux Pascal cuenta que se crió con las películas de Pedro Almodóvar, Alejandro Amenábar, Álex de la Iglesia o Jaume Balagueró, y este conocimiento le hace respetar «muchísimo» el cine español, en el que espera volver a trabajar tras interpretar a una mujer trans que consigue ser minera en ‘Miss Carbón’.

«Las puertas las tengo abiertas y espero que me las abran a mí también», ha asegurado a EFE en una videoconferencia desde Canadá, donde rueda una comedia romántica la hermana del también actor Pedro Pascal, nacida en 1992 en Condado de Orange (California).

En ‘Miss Carbón’, que se estrena este jueves, se pone en la piel de Carlita, Carla Antonella Rodríguez, la primera minera en una región de la Patagonia Argentina en la que las mujeres tenían prohibido el acceso a ese trabajo, en concreto el pueblo de Rio Turbio.

«Ella quiso cumplir un sueño y lo cumplió», opina sobre el logro de esta mujer trans que ha acudido a Madrid a presentar esta película dirigida por la argentina Agustina Macri en la que también participa Paco León.

Sobre sus propios sueños cumplidos, Pascal asegura que hacer ‘Miss Carbón’ y estar siendo entrevistada por ello ya lo es. «La pequeña Lux estaría muy contenta de la adulta Lux, de donde ha llegado», dice.

Su interpretación de una mujer minera y específicamente mecánica ha sido lo «más desafiante», ya que «está totalmente despegado de lo que yo hago como artista», confiesa la actriz, que se sometió a un proceso de aprendizaje técnico para entrar en ese papel en el que transmite dulzura y calma, pero también determinación.

«La minería me cambió y me dio dignidad»

El actor Paco León y la actriz Lux Pascal posan a su llegada a la entrega de los Premios Platino en Madrid. EFE/ Daniel González

La propia Carla Antonella Rodríguez explica a EFE que decidió que debía entrar a trabajar en la mina porque era «la única salida» laboral a la que podía optar en su pueblo de la Patagonia, donde su vivencia trans y disidente ya complicaba enormemente sus posibilidades.

«No se imaginan lo cruel y perversa que puede ser la humanidad», añade Carlita, que se acercaba de niña a las minas y veía cómo entraban en ella sus trabajadores. «La minería salva vidas, a mí me cambió y me dio dignidad», asegura sobre la dura tarea que ella aún desempeña.

«Mis compañeros de trabajo fueron los que me dijeron ‘vení con nosotros, aquí estás segura’ y fueron ellos los transformadores» cuando los problemas laborales empezaron a hacerse mayores a medida que avanzaba en su transformación física y legal, remarca Rodríguez.

De esta historia a la directora le atrajo la posibilidad de relatar una vivencia de esta comunidad no relacionada tan solo con la transición de género. «Que fuera una mujer trans era más su superpoder que el tema central», asegura Macri, que se declara entusiasmada con que la película «pueda viajar, con el apoyo también de Netflix en algunas regiones».

La historia de Carlita se conoce sobre todo por la guionista de la película, Erika Halvorsen, criada en su mismo pueblo minero. Desde pequeña cuestionaba que las mujeres solo pudieran entrar en la mina el día de Santa Bárbara por una superstición que hablaba de un posible derrumbe si lo hacían en otras fechas, especifica.

«Volví al pueblo, del que me había ido para ser escritora. Conocí a Carlita y decidí que eso se tenía que conocer ya. Escribí una crónica, le conseguí un reportaje en la radio, y le prometí que iba a llevar su historia al mundo. Y aquí estamos», remarca.

En la película aparece también Paco León con un papel breve pero muy significativo. «Es un personaje misterioso que trae la promesa del amor, que le hace creer que es posible, que hay hombres buenos que la miran como una persona», describe el actor español.

En su relación aparecen aspectos como la posible dificultad de un hombre de mostrar abiertamente en sociedad su relación con una mujer trans, aunque en su caso, por su condición de «lobo solitario» sin una reputación que salvar no parece ser ese el problema, añade.

«Lo que pasa es que es fácil confundirse. Cuando un hombre te trata bien y te da ternura, no tiene por qué estar enamorado» subraya León, para quien «todas las historias no son buenas o malas por como acaban, sino por como son».