Sevilla (España), 30 jun (EFE).- El presidente francés, Emmanuel Macron, denunció este lunes la «aberración» que supone que «los más fuertes» hayan devuelto al mundo a una lógica de guerra comercial «como forma de chantaje y no de reequilibrio».
Macron, en su intervención en la jornada de apertura de la IV Conferencia Internacional de Naciones Unidas sobre Financiación al Desarrollo, que se celebra en Sevilla (sur de España) planteó que un comercio que reequilibre los flujos económicos «es una de las condiciones para poder desarrollar cadenas de valor y de la creación de valor económico en los países más pobres y en desarrollo».
Por ello, consideró que «volver a plantear una guerra comercial y arancelaria en este momento es un aberración», sobre todo cuando los aranceles se imponen a países «que están a punto de despegar».
En consecuencia, dijo, «debemos devolver libertad y equidad al comercio internacional en lugar de aranceles y de barreras que son pensadas por los más fuertes y como una forma de chantaje, no como forma de reequilibrio».
«Necesitamos repensar y apoyar a la Organización Mundial del Comercio» (OMC) a fin de situarla en una posición de «coherencia con nuestros objetivos de lucha contra las desigualdades y nuestros objetivos climáticos», insistió el presidente francés.
Macron reconoció que la situación del desarrollo global afronta «una situación difícil» que se ha deteriorado en los últimos años, tras la pandemia, con un incremento del endeudamiento y la dependencia.
El aumento de los gastos en seguridad o las tensiones en las finanzas públicas en muchos países son algunos de los factores que «limitan la capacidad de financiar la solidaridad internacional».
Y también insistió en los efectos de los conflictos comerciales, aunque no mencionó en ningún momento a Estados Unidos o al presidente Donald Trump: «La guerra arancelaria es mala para todo el mundo y pesa en la capacidad financiar el desarrollo».
Macron, que agradeció a su «amigo» el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, la organización de esta cumbre de Sevilla, avanzó que la financiación del desarrollo será uno de los ejes de la presidencia francesa del G7 que su país asumirá el año próximo y que tendrá su momento culminante en la cumbre de la localidad de Evian, en junio de 2026.