Madrid, 23 may (EFE).- La Copa del Mundo de Sable masculino se disputa del 23 al 25 de mayo en la Villa de Madrid, lugar donde 250 profesionales de más de 45 países diferentes usarán un arma que vale en torno a 240 euros; cuyo material es de acero inoxidable; de 105 centímetros de largo y medio kilo de peso.
“El sable no se fabrica en España, pero sí en Francia, de donde salen las hojas más utilizadas en el circuito internacional, que luego se distribuyen e importan a España desde Alemania (marca Allstar) y Hungría (marca PBT)”, apuntó Diego Balmori, responsable de Comunicación de la Real Federación Española de Esgrima, a EFE.
Radiografía de un sable profesional
El sable profesional mide como máximo 105 cm y pesa poco menos de 500 gr, formado por un protector en forma de cuenco (que se curva bajo la mano), y una hoja en forma de T de 88 cm de largo; se trata de la más corta de las tres armas usadas en la esgrima (sable, florete y espada) pero también la más flexible.
“Los sables están formados por un puño, una cazoleta y una hoja. Lo que se rompe más habitualmente es la hoja, que es lo que hay que cambiar cada vez que se parte. La duración de una hoja si está bien cuidada puede ser de una temporada, el resto de partes pueden durar durante varios años”, dijo Balmori.
El material es una aleación de acero denominada ‘maraging’, una fusión de alta resistencia, con bajo contenido de carbono, y que se endurece mediante un proceso de envejecimiento de tratamiento térmico a baja temperatura.
“La ventaja que tiene el acero maraging es que no se oxida, así que los cuidados son mínimos. Lo fundamental es tratar de que la línea de la hoja (su curvatura) sea lo más continua posible para que tarde más en partir”, añadió Balmori.
España, referencia en el sable masculino
Se datan en más de 3.000 años atrás los primeros registros de la esgrima, cuando la disciplina se utilizaba como herramienta para la supervivencia y la caza. En 2025, es el único deporte de combate olímpico en el que no se permite el contacto cuerpo a cuerpo.
Un deporte que se practica en una pista de 14 metros de largo y entre 1,5 y 2 m de ancho, que es olímpico desde Atenas 1896 y en el que España ha ido creciendo con el tiempo con grandes resultados.
En la categoría de sable se pueden acumular puntos tanto con la punta como con el costado de la hoja, lo que permite tocar al oponente en la cabeza, el torso y la parte superior del cuerpo, excepto las manos. Esto hace que el duelo con el sable sea muy rápido y ofensivo.
Los sablistas masculinos españoles están siendo habituales en las fases finales de las competiciones (entre los 64 mejores, en copas del mundo con alrededor de 300 participantes). Para la cita de este fin de semana en Madrid, 20 sablistas nacionales formarán el equipo español.
Santiago Madrigal con solo 21 años ya tiene 2 medallas de bronce en copas del mundo senior y se encuentra el 24° del ranking mundial. Pero también hay varios nombres que ya son habituales en la fase final como Yago Morán, los hermanos Flórez (Carlos y Jaime) y Óscar Fernández. EFE
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