San Juan, 8 sep (EFE).- Las maniobras militares de Estados Unidos continuarán en Puerto Rico y llegarán más equipos, como los aviones de combate F-35, aseguró este lunes la gobernadora Jenniffer González, coincidiendo con la visita a la isla del secretario de Guerra estadounidense, Pete Hegseth.
«El Gobierno de Puerto Rico está comprometido en esta lucha contra el narcotráfico. Vamos a seguir viendo estas maniobras, vamos a ver la presencia de muchos de estos equipos en Puerto Rico», dijo González en una rueda de prensa.
Hegseth, acompañado del jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, Dan Caine, visitó a las tropas que llevan a cabo entrenamientos anfibios y vuelos tácticos y que se enmarcan en la llamada guerra contra el narcotráfico y las tensiones con Venezuela.
Para González, esta presencia militar estadounidense es «un mensaje directo al líder del cartel en Venezuela Nicolás Maduro de que los Estados Unidos no le van a pasar una más».
Preguntada en la rueda de prensa, la gobernadora dijo que no se ha mencionado el tiempo que durarán las maniobras ni la cantidad de tropas que estarán involucradas: «Siguen llegando, no hay un número definido», indicó.
«Esto acaba de comenzar, el reposicionamiento en la isla de fuerza militar para atacar el narcotráfico en toda la jurisdicción del Caribe. Puerto Rico es la frontera de los Estados Unidos en el Caribe por su cercanía a Venezuela y Colombia», subrayó.
Por ello, aseguró que se alegra de que el presidente Donald Trump «haya puesto los recursos del Gobierno federal para meterle mano directamente al narcotráfico».
«Que Puerto Rico pueda ser el centro de operaciones y logística del Gobierno de los Estados Unidos para Sudamérica por nuestra posición geográfica nos vuelve a colocar en un lugar de importancia», destacó.
El estatus de Puerto Rico como Estado Libre Asociado a EE. UU. implica cierto grado de autonomía y un Gobierno y Parlamento locales, pero deja bajo el control de Washington áreas como defensa, fronteras y relaciones diplomáticas.
Ante el miedo a que vuelvan a producirse daños medioambientales y de salud, la gobernadora negó que se haya hablado de estos impactos porque son «ejercicios normales que el Gobierno federal también hace en otros estados».
«No se están haciendo bombardeos en Vieques ni en Culebra, no hay presencia militar allí. Estamos hablando de las facilidades que usa la Guardia Nacional para hacer sus entrenamientos y los movimientos anfibios se están haciendo como cualquier ejercicio militar», zanjó.
La Marina de Estados Unidos utilizó Vieques y parte de Culebra como campo de tiro hasta mayo de 2003 y, a día de hoy, la limpieza de los restos de munición sin detonar en ambas islas aún no ha finalizado.
El respaldo de la gobernadora a las políticas de Trump y a las maniobras militares en la isla no es compartido por otros partidos políticos ni por muchos ciudadanos.
Ayer mismo, cientos de personas se manifestaron frente a la Base Aérea Muñiz en rechazo a las maniobras del Ejército estadounidense y a una posible reactivación de las antiguas bases militares de la isla.