Marlaska destaca que el buque Duque de Ahumada es «un ejemplo» de cooperación europea

El ministro del interior, Fernando Grande-Marlaska (c) acompañado por el delegado del Gobierno, Pedro Blanco (i) durante su visita al buque oceánico de la Guardia Civil 'Duque de Ahumada', que se incorpora al Grupo Marítimo del Estrecho, en los Astilleros Armón en Vigo. EFE/Brais Lorenzo

Vigo, 18 sep (EFE).- El ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha destacado este viernes, durante la entrega a la Guardia Civil del nuevo buque oceánico Duque de Ahumada, que este barco de grandes capacidades es «un ejemplo» de la cooperación europea que contribuirá a «fortalecer las fronteras españolas».

El buque, que ha supuesto una inversión de 35 millones de euros, ha sido financiado en un 90% por fondos europeos, lo que, según el ministro, muestra la «relevancia del apoyo europeo» en la dotación de medios de gran envergadura para prevenir y detectar la inmigración ilegal, así como para gestionar eficazmente los flujos migratorios.

«Es un ejemplo de la política de cooperación europea, que suma, que contribuye a fortalecer la cohesión y a robustecer, en este caso, la protección de nuestras fronteras, las españolas, que son también las fronteras exteriores de la Unión Europea», ha subrayado.

A la ceremonia de entrega en el astillero Armón del puerto de Vigo, han asistido también el delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco; el alcalde de Vigo, Abel Caballero; la directora general de la Guardia Civil, Mercedes González; el consejero delegado de Armón, Laudelino Alperi; y el Mando de Fronteras y Policía Marítima, el teniente general Manuel Navarrete.

Un hito tecnológico de primer nivel

El Duque de Ahumada renovará la flota del Servicio Marítimo de la Guardia Civil y trabajará en la prevención de la delincuencia transfronteriza, la seguridad marítima o la lucha contra la inmigración irregular, además de participar en misiones humanitarias.

Construido en los astilleros vigueses Armón, supone un hito tecnológico de primer nivel y un importante incremento de las capacidades operativas de la Guardia Civil en el desempeño de sus funciones en el ámbito marítimo.

Dispone de cinco cubiertas, con helipuerto, dos embarcaciones de rápida intervención y un rov —vehículo submarino operado remotamente— para la inspección y rastreo subacuático de hasta 1.000 metros de profundidad.

Además, está dotado con equipos de navegación y comunicaciones de última generación, espacios hospitalarios y enfermería, área de seguridad y zona de náufragos para un mínimo de cien personas.

Tiene una autonomía superior a las 11.000 millas, con capacidad para permanecer en el mar sin tocar puerto hasta 30 días. Podrá alcanzar una velocidad de 18 nudos y tendrá una velocidad de patrulla superior a los 11. Contará con alojamiento a bordo para 44 miembros de la tripulación y 12 personas ajenas a ella.

Marlaska ha recalcado durante el acto de entrega que el barco contribuirá a «una mayor eficacia en el control de fronteras y a la lucha contra las mafias que trafican con personas».

«Una de las cosas positivas de estos más de siete años al frente del Ministerio del Interior es poder ver proyectos tan importantes como este desde un inicio y verlos ya hechos realidad», ha destacado el ministro posteriormente en declaraciones a los periodistas.

Financiación europea

Su construcción ha contado con una inversión de 32 millones de euros procedentes de fondos europeos destinados a adquirir equipamiento para los Estados miembros y la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas (Frontex), dentro del Instrumento de Apoyo Financiero a la Gestión de Fronteras y la Política de Visados.

En el mismo marco presupuestario, la Guardia Civil ha obtenido también 20 millones de euros, financiados al 75 por ciento por la Comisión Europea, para sufragar los gastos de mantenimiento del Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) durante los años 2023, 2024 y 2025.

El nuevo buque oceánico sustituirá al Río Miño tras haber cumplido su periodo de vida útil y se incorporará al Grupo Marítimo del Estrecho, con base en la Zona Franca de Cádiz, donde ejercerá misiones vigilancia marítima en aguas de soberanía española alrededor de la península ibérica.

El Servicio Marítimo de la Guardia Civil está compuesto por casi 150 unidades navales entre buques oceánicos, embarcaciones de altura, patrulleras medias, ligeras y de apoyo.

Este servicio está desplegado en las provincias costeras. Además, existe un despliegue en África occidental con el Destacamento de Senegal, otro en Mauritania y tres Asistencias Técnicas de vigilancia fluvial en Saint Louis y Kaolack (Senegal) y Banjul (Gambia).