Enric Sitjà Rusiñol
Barcelona, 11 sep (EFE).- La cultura iberoamericana, que estará presente en la Conferencia de la Unesco Mondiacult de este septiembre en Barcelona, tiene entre sus retos principales conseguir más inversión, paliar «discursos involucionistas» y «poner en valor» las cualidades de la región.
Así lo señala el secretario general de la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI), el madrileño Mariano Jabonero, en una entrevista con EFE en Barcelona, donde esta semana ha participado en las jornadas «Derechos Culturales y Economía Creativa para el Desarrollo Sostenible».
«Los retos: poner en valor lo que somos y lo que valemos, invertir más y mejor y contrarrestar un discurso involucionista», sintetiza Jabonero, que emplaza a la cultura iberoamericana a «poner en valor su potencial y su capacidad creativa».
«Es una región extensa, la región más rica en recursos naturales del mundo, con una gran diversidad cultural y, quizá, no está puesta en valor como merece», lamenta el secretario general de la OEI, que también denuncia una «inversión injusta» en cultura.
Recuerda, en este sentido, que en los países iberoamericanos se destina una partida «por debajo del 1 % del PIB» al sector cultural, cuando este «aporta mucho más» a las economías estatales.
Pese a todo, subraya: «Con la poca inversión que se produce, hay unos rendimientos muy altos».
«Un peligro ideológico»
Jabonero, que es secretario general de la OEI desde 2018, identifica «ciertos discursos que están funcionando en la región» que se sitúan «en contra» de asuntos como «la diversidad, la inclusión, la igualdad o el respeto», por lo que este es «un peligro más ideológico».
Apostilla que estos postulados no provienen de un sector político en concreto: «Ha sido siempre una tendencia de cualquier posición autoritaria, la que sea, controlar la cultura».
Así, pide a las instituciones y a la sociedad que se entiendan las diferentes expresiones culturales como «algo mucho más complejo» que «un placer pequeñoburgués», puesto que, entre otras cualidades, «tiene una capacidad de valor importante» en materia económica, laboral y de integración.
Jabonero, que ha ocupado puestos directivos en el Ministerio de Educación español y ha sido consultor de organismos internacionales como Unesco, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) o la Organización de los Estados Americanos (OEA), es partidario de ver las nuevas tecnologías como herramientas que permiten la «pervivencia» de lenguas originarias de países de América del Sur, como el quechua, o minoritarias, como el catalán.
«Cuando se incendió el Museo de Río de Janeiro desaparecieron los restos de muchísimas lenguas, de las cuales solamente había testimonio escrito», recuerda, y asegura que, «gracias a sistemas digitales, se puede hacer una preservación» de estos idiomas.
Sobre la inteligencia artificial en concreto, el secretario general de la OEI reconoce que es «una herramienta ajena», ya que «viene del mundo anglosajón», y que «no se construyó» en clave cultural ni educativa.
«Es inconclusa, (…) no sabemos cómo evolucionará», añade, y apuesta por construir un sistema de IA «propio de nuestra comunidad y que atienda a la diversidad» presente en ella.
De hecho, Jabonero explica que la OEI defiende la «participación plena» de las lenguas originarias de América Latina en «lo que es la cultura oficial» y pone ejemplos de ello, como la traducción de cuentos tradicionales de estas culturas al castellano o al portugués, o la creación de traductores digitales.
«La cultura no está en la agenda del autoritarismo»
Por otra parte, el secretario general radiografía la situación mundial actual, que tilda de «delicada» y en la que observa «cuestionamientos al multilaterialismo»: «En este mundo del autoritarismo, la cultura no está en su agenda, así de claro».
Ante un posible aumento del belicismo, reivindica la «cultura de paz, democrática y de libertades» que enarbola la OEI.
«En este momento, en el mundo hay 59 conflictos armados, (…) ninguno en América», asevera, por lo que defiende erigir al continente como «parte de la solución» a los retos mundiales que identifica.
Mariano Jabonero cuenta con reconocimientos como la Orden de Alfonso X El Sabio y el título de Doctor Honoris Causa por la Universidad Nacional Abierta y a Distancia de Colombia (UNAD). Durante su mandato, la OEI ha sido reconocida con el Premio Princesa de Asturias de Cooperación Internacional 2024.
