París, 13 ago (EFE).- La ola de calor dio una tregua mínima este miércoles en Francia, después de dos jornadas con temperaturas muy intensas, especialmente en el sudoeste, pero los termómetros volvieron a marcar récords en puntos del centro y el este del país.
Hasta las 17 horas (15 horas GMT), la agencia meteorológica nacional Méteo-France destacó las máximas históricas alcanzadas en puntos como Châteaumeillant, con 41,7 ºC, o Montbeugny, con 41,1 grados, ambas localidades de la zona central del territorio galo.
También comunicó récords en varios lugares de la región alpina y fronteriza con Italia de Saboya, como en St Michel de Maurienne, con 39,7 grados, o Bourg-St-Maurice, con 38,2 grados, a pesar de ser zonas de altitud.
La mejora se notó algo en el oeste del país, sobre todo, donde las máximas disminuyeron varios grados, pero en total hubo cinco departamentos en alerta roja y casi todo el resto del país estuvo en alerta naranja.
«En promedio, a escala nacional, los días lunes 11, martes 12 y miércoles 13 de agosto constituyen un primer pico de altas temperaturas en promedio nacional», señaló Méteo-France, antes de que el fin de semana vuelva a dejar nuevos picos de calor a partir del viernes.
Para mañana, «tras una noche calurosa en el este del país y en la costa mediterránea, con temperaturas a menudo superiores a los 20 grados», habrá una «ligera atenuación» del calor en el norte y el este, sin dejar de ser intenso.
En el sudoeste los termómetros se mantendrán entre los 35 y los 38 grados, o incluso los superarán un poco en la región de Occitania, fronteriza con España.