Buenos Aires, 20 sep (EFE) .- El presidente argentino, Javier Milei, admitió este sábado que la reciente devaluación del peso, que se ha depreciado un 10 % en lo que va del mes frente al dólar estadounidense, podría trasladarse a los «precios, y podría además impactar sobre el nivel de actividad”.
«Se volatilizó la demanda de dinero», explicó Milei en una extensa entrevista para Radio Mitre y agregó: «Hay que ver si esa volatilización tiene como contrapartida una caída de la demanda de dinero vinculado a lo que tiene que ser las transacciones. En ese caso podría ir a precios y podría además impactar en el nivel de actividad».
En ese sentido, aseguró que están armando “un sistema financiero anticorridas” para evitar en el futuro movimientos bruscos en el tipo de cambio.
Solo en lo que va de septiembre, el índice S&P Mercal de las acciones líderes argentinas acumula un derrumbe del 15 %, mientras que los bonos soberanos en dólares arrastran caídas de entre el 21 % y el 29 % y el índice de riesgo país de Argentina ha trepado casi un 74 %.
Las turbulencias también sacudieron al peso argentino, que se ha depreciado un 10 % en lo que va del mes frente al dólar estadounidense.
Para intentar frenar el alza en el precio de la divisa estadounidense, en medio de una creciente presión cambiaria, el Banco Central de la República Argentina vendió entre el miércoles y el jueves 1.110 millones de dólares.
“Sabíamos que este iba a ser un año muy complejo y nosotros estábamos trabajando para cerrar los pagos de deuda que tiene Argentina el año que viene, que son 4 mil millones de dólares en lo que es el mes de enero y 4.500 en el mes de julio», explicó Milei en la entrevista.
El mandatario ratificó lo anunciado ayer sobre las conversaciones con el Tesoro de los Estados Unidos por un nuevo préstamo para la Argentina: «Estamos muy avanzados en las negociaciones y haremos todo lo que sea necesario para preservar el bienestar de los argentinos y seguir adelante”.
Elecciones y escándalo de corrupción
Aunque las tensiones en los mercados suceden desde mediados de este año, han sido mayores desde el duro revés del oficialismo en las elecciones legislativas celebradas en la provincia de Buenos Aires el pasado 7 de septiembre, un resultado cuya magnitud no esperaban los mercados ni el propio Gobierno.
La derrota electoral en el distrito que concentra al 38 % de la población argentina ha dejado mal parado al oficialismo de cara a los comicios legislativos nacionales del 26 de octubre.
El presidente manifestó, no obstante, optimismo ante las próximas elecciones y expresó que “las distritales nunca fueron un buen predictor de las nacionales».
Milei también fue consultado por el escándalo de corrupción desatado el pasado 20 de agosto, tras la difusión de audios atribuidos al director de la Agencia Nacional de Discapacidad, Diego Spagnuolo, describiendo un esquema de sobornos dentro del organismo del que la secretaria general de la Presidencia y hermana del mandatario, Karina Milei, sería beneficiaria.
«Si Spagnuolo tenía esa certeza de que había corrupción, lo tenía que denunciar», afirmó Milei, sobre el funcionario que fue apartado de su cargo tras la difusión de las grabaciones.
El presidente negó las peleas al interior de su Gobierno y descartó que haya sido el asesor presidencial Santiago Caputo el responsable de filtrar los audios.
«¿Creés que yo podría tener una buena relación con Santiago Caputo si se mete con mi hermana?», le preguntó Milei al conductor.
El mandatario argentino volará este domingo a Nueva York, donde intervendrá en el Debate General de la Asamblea de la Organización de las Naciones Unidas, mantendrá una reunión bilateral con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump y un encuentro con el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu.