Buenos Aires, 6 oct (EFE).- Cuando restan apenas veinte días para los comicios legislativos en Argentina, el presidente Javier Milei busca cómo frenar la crisis que envuelve a su partido, La Libertad Avanza (LLA). El último escándalo es el nexo de su allegado y candidato José Luis Espert con un empresario acusado por narcotráfico en Estados Unidos.
Tras una semana de creciente polémica por el vínculo entre el diputado oficialista Espert y el empresario Federico ‘Fred’ Machado, requerido por la Justicia estadounidense, finalmente Milei desistió de seguir sosteniendo la candidatura del economista a las elecciones del 26 de octubre.
En la noche del domingo, Espert anunció que renunciaba a ser candidato a la Cámara de Diputados por la provincia de Buenos Aires, el mayor distrito electoral del país y en el que el oficialismo ya sufrió un duro revés el pasado 7 de septiembre.
Milei aceptó la renuncia de Espert a la candidatura, pero ambos insistieron en que el diputado es inocente y que la denuncia en su contra es una «campaña sucia» montada por la oposición kirchnerista.
«Espert no tuvo claridad para explicar la situación y eso generó dudas o sospechas. Creo que fue un error de comunicación», afirmó este lunes el jefe de Gabinete de Argentina, Guillermo Francos, en declaraciones a Radio Mitre.
Francos reconoció que las dudas sobre el vínculo de Espert con Machado causaron un «daño» a la campaña del gobernante partido de ultraderecha: «Se centraba todo en este tema».
Este lunes, Espert también decidió renunciar a su cargo como presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados, justo cuando la oposición se disponía a impulsar su remoción.
Cúmulo de problemas
Con Espert ya fuera del ojo de la tormenta, el oficialismo busca evitar que este escándalo agigante la posibilidad de una derrota electoral el 26 de octubre.
Los últimos sondeos de opinión dibujan un panorama adverso para la formación ultraderechista La Libertad Avanza y tanto la imagen negativa de Milei como el nivel de desaprobación a su gestión van en aumento.
Los problemas para LLA no empezaron con el ‘caso Machado’: en febrero el propio Milei se vio envuelto en un escándalo por su rol en el fallido lanzamiento de la criptomoneda $LIBRA, que originó millonarias pérdidas a inversores de todo el mundo, mientras que en agosto una denuncia por corrupción en la Agencia Nacional de Discapacidad salpicó al seno del Gobierno, incluida su hermana Karina.
Más allá de estos casos resonantes, hay otros factores políticos y económicos que explican el deterioro del apoyo popular a LLA.
Entre ellos está el empeño de Milei de vetar las leyes aprobadas por el Parlamento dirigidas a incrementar fondos para la salud pediátrica, la universidades públicas, las personas discapacitadas y los jubilados, todos sectores muy castigados por la política de ajuste del Gobierno.
El Ejecutivo también ha tenido problemas para tejer consensos con gobernadores y sectores opositores, incluso con Propuesta Republicana (Pro), el partido del expresidente Mauricio Macri (2015-2019), cuyo apoyo fue clave para el triunfo de Milei en la segunda vuelta presidencial de 2023 y para que en 2024 el oficialismo sacara adelante en el Parlamento leyes importantes para el Gobierno.
Ahora, en plena crisis por la denuncia con Espert, Milei tuvo que rehabilitar el diálogo con Macri.
Diego Santilli, uno de los dirigentes más cercanos al expresidente, podría reemplazar Espert como cabeza de lista de los candidatos de LLA en la provincia de Buenos Aires, bastión peronista y donde el oficialismo perdió por amplio margen en los comicios legislativos provinciales celebrados hace un mes.
En medio de este cúmulo de problemas, Milei ha dejado entrever que remodelará el gabinete de ministros luego del 26 de octubre.
Complejo escenario económico
El factor económico también fue determinante para la derrota del partido de Milei el 7 de septiembre: la actividad muestra signos de estancamiento desde el segundo trimestre y la precariedad laboral es elevada.
Además, el programa económico muestra inconsistencias, a tal punto que Argentina negocia una millonaria asistencia financiera de Estados Unidos pasados solo seis meses de haber firmado un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), con desembolsos totales por 20.000 millones de dólares.
Los comicios del 26 de octubre no sólo revelarán qué grado de apoyo le da la ciudadanía al Gobierno de Milei sino que, además, definirán cuántos escaños parlamentarios obtendrá el oficialismo para sacar adelante las reformas estructurales comprometidas ante el FMI.
Natalia Kidd