Madrid, 13 jun (EFE).- El presidente de Argentina, Javier Milei, defendió este viernes en España su programa de desregulación de la economía y de recortes en gasto público que está llevando a cabo en su país y que dijo, ha llevado a que diez millones de personas salgan de la pobreza.

Milei, que recibió en Madrid el Premio Escuela de Salamanca que otorga el Club de los Viernes, una organización que promueve la libertad del individuo frente al Estado, hizo un repaso de las medidas que ha puesto en marcha su gobierno desde que llegó al poder en diciembre de 2023, todas ellas sin ceder a las presiones ni a las críticas de los opositores políticos y de los que llamó «periodistas corruptos» «seres despreciables en un 90 %».
Definió la situación de cuando llegó al poder de una manera muy gráfica: estábamos literalmente desnudos, llenos de agua, bañados en la silla eléctrica y con muchos tratando de enchufarla», y si no se hubieran tomado medias «hubiéramos tenido una situación aún peor que la de Venezuela», destacó a la vez que defendió que en política «hay que tener coraje».
Ante un auditorio que le aplaudió en numerosas ocasiones, afirmó que su gobierno ha reducido el gasto público un 30 %, que está erradicando la inflación, al pasar del 300 % anual al 20 % actual y pronosticó que desaparecerá el próximo año, mientras que la pobreza ha bajado del 57 % al 35 %. «Diez millones de personas salieron de la pobreza», afirmó «favorecimos a los que menos tienen, nosotros, los libertarios».
Y concluyó que «ajustar al Estado fue expansivo».
El presidente argentino se refirió también al préstamo negociado con el Fondo Monetario Internacional, y dijo que se hizo «para sanear el activo del Banco Central, para que los pesos en los bolsillos de los argentinos tengan valor, no sean papel pintado». Y recordó que al final, después de «todo tipo de presión» por parte de la oposición y «todo tipo de mentiras» de muchos periodistas, se consiguió un paquete de 49.000 millones de dólares, de ellos, 20.000 del FMI y 12.000 del Banco Mundial.
Insistió en que Argentina cumplió con los acreedores «respetando el derecho de la propiedad a rajatabla»
Milei defendió su política de desregulaciones y las bajadas de impuestos, ya que considera que estos «son un robo», pero insistió en que necesita tiempo y afirmó que si está en el poder hasta 2031 puede crecer entre un 6 y 8 % anual.
Sobre la transformación monetaria que su gobierno está realizando recordó que se eliminó la obligatoriedad de declarar salvo si se gasta más de 50.000 dólares por mes, por lo que los argentinos pueden gastar el efectivo que estaba fuera del sistema sin persecución. «Los individuos pueden monetizar la economía cando y como quieran, van a poder disponer del fruto de su trabajo libremente».
Con todo esto, «dolarizar y cerrar el Banco Central va a ser tan fácil como un chasquido de dedos, dijo».
A su llegada la acto de entrega del premio, Milei fue recibido con el famoso grito de «¡Viva la libertad carajo!». Entre los curiosos congregados a las puertas del Centro Riojano de Madrid, donde se celebró el acto, había algunos compatriotas que se acercaron a ver a su presidente.
«Es medio loco y a veces mete la pata, pero es el único que puede salvar Argentina», dijo a EFE una porteña que quería saludar a Milei.
Otro joven argentino de 20 años, que lleva cinco viviendo en Madrid, contaba que confía en la receta del presidente y espera volver a Argentina si el presidente logra mejorar la situación económica, aunque cree que le llevará un tiempo.
El presidente argentino fue despedido con más gritos de apoyo y aplausos de los asistentes, a los que saludó antes de partir.
Milei retomó este viernes su agenda en España, después de su breve estancia en este país el pasado día 8, cuando participó del Cierre del Madrid Economic Forum.
Su estancia en España finalizará mañana sábado, y pone fin a una gira internacional que comenzó el viernes 9 de junio en Roma, continuó en Madrid y París, de donde partió a Israel para permanecer tres días, hasta su vuelta a España hoy. EFE
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